Valerie (pausada indefinidamente)

Capítulo 18: No te vayas, por favor

Valerie

-Te quiero, cari. -le digo cuando nos separamos.

-Yo también, cari, muchisimo. -le doy un corto beso- Tengo que decirte algo.

-Lo que quieras. -contesto un poco extrañada.

-Te quiero. Te quiero tanto que subiría al cielo a coger las estrellas para iluminar tu rostro por la noche. Si, estoy enamorado de ti.

Vale, por Dios, creo que acabo de morirme de amor. ¿De verdad acaba de decirme que está enamorado de mi? QUE MONO. Por el Ángel, está enamorado de mi. Esto acaba de pasar de verdad, no me lo he imaginado. 

Tengo que decirselo yo también, se me ha adelantado. Pero eso ahora no importa. Me acerco y le doy un largo beso en el que pongo todo mi amor.

-Yo también estoy enamorada de ti, mi vida.

Veo como su sonrisa se ensancha más, me abraza y me da muchos besos. Sonrío. Que bien sienta esto. Uno de los besos se intensifica, y lo único que quiera es estar en casa. En mi habitación, con él.

-¿Vamos a mi casa? -pregunta con la respiración un poco entrecortada.

-Claro, vamos.

Nos levantamos, nos cogemos de la mano y vamos hasta su casa. Cuando entramos, cierro la puerta tras de mi y Darren me acorrala contra la pared, me sube los brazos por encima de la cabeza y me besa apasionadamente. Me suelta los brazos y le quito la camiseta, la cual tiro a alguna parte de la habitación. Luego le desabrocho los pantalones, que caen al suelo. Me da la vuelta, baja la cremallera del vestido y me va dando besos por la espalda. Cuando está desabrochado, el vestido ce al suelo, formando un circulo a mis pies.

Salgo del vestido y empujo lentamente a Darren hacia la cama. Cuando queda estirado, me subo a horcajadas encima suyo y empezamos a besarnos. Le beso en el cuello, lentamente, y voy bajando hasta... ya sabéis donde.

Nos quedamos dormidos y, al despertar, me encuentro fuertemente abrazada por Darren. Pasamos todo el día con el calor de la chimenea, viendo películas y haciendo batallas de cosquillas entre besos y risas.

Viernes, 14:45 p.m.

Acabo de salir de clase y recibo un whats de mi madre:

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Me preocupo y voy a casa de mis abuelos, acompañada de Darren. Llegamos en 15 minutos y nos quedamos en la calle esperando a que llegue la ambulancia. 

Hace más de una hora que han llamado, y todavía no está aquí. Media hora más tarde la vemos (por fin) aparcar en frente de la porteria, y subo a casa. Ayudo a que pongan a mi abuelo en una silla de ruedas y lo bajan a la calle, para llevarlo al hospital.

Resultado: rotura de fémur y de rodilla. Se tiene que operar. 

Una de las posibles razones por las que le ha podido pasar eso es que, el cáncer que tiene el en riñón se le haya pasado a la pierna también, es decir, metástasis. (puto cáncer)

Sábado, 12:20 a.m.

Mi abuela y yo cogemos un taxi para ir al hospital a ver a mi abuelo. Está con morfina y no sé cuantas cosas más. Le duele muchisimo la pierna, pero aguanta como un campeón. Le traen la comida, pero es un cabezón, y no se la quiere comer, así que adivinad quien se come la pechuga de pollo al horno. (ö/) Por la tarde viene Ness, y mi abuela y yo volvemos a casa. Durante el fin de semana se queda mi madre en el hospital a dormir, para que él no esté solo, y estar ahí por si pasa alguna cosa.

La semana pasa lenta, intentando concentrarme en clase, sin pensar en mi abuelo, cosa que no consigo.

Los médicos dicen que tienen que operarlo, pero tienen que hacerle una prueba antes de eso.

El viernes paso la tarde en casa de Darren. Intenta distraerme haciéndome cosquillas, hablando de tonterías, entre besos y sonrisas.

A las 20:00 salgo de su casa y voy al hospital en metro. Esta noche me quedo yo con él. Cuando llego, mi madre se va a casa. Lleva varios días sin dormir bien, y tiene que descansar. Duermo poco, estirada en el sillón reclinable que hay en la habitación del hospital, estando atenta a lo que necesita mi abuelo: el oxígeno, beber agua, etc. No me importa haber dormido poco, por él hago cualquier cosa.

A la hora de comer, Nessie viene al hospital, yo aprovecho para ir a casa a comer, ducharme, y dormir un poco. Por la tarde voy a la fiesta de cumpleaños de un amigo, que cumple los 18.

Ha alquilado una sala, en la que hay música, una tele, etc. También hay un parque de bolas, y Víctor y yo, en cuanto la vemos, nos metemos corriendo, como si fuésemos niños pequeños. La tarde pasa bastante rápida, con música, partidas a los dardos, comiendo patatas y riendo.

A las 19:00 me despido de todos, le doy un largo beso a Darren y vuelvo al hospital. Esa noche también la paso ahí. Cuando llega mi hermana me voy a casa, y estudio, ya que mañana es lunes y tengo examen.