IV. TRISTEZA (EDITADO - Feb22)

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Por ahí, en algún lugar escondidos...

- ¡Estúpidos, ellas eran sólo mujeres y eran menos que ustedes! - gritó el líder demasiado molesto - además, por lo que escuché ni si quiera pelearon contra el equipo completo.

- P-pe-pero, Orochimaru-sama, eran muy fu...

- ¡Cállate!, ustedes son unos idiotas, ahora lárguense de aquí

- Discúlpenos, Orochimaru-sama

- Kabuto ven por favor - ordenó el líder.

Un ninja delgado, alto, de pelo gris y con anteojos apareció por detrás de éste.

- Sí, mi señor, ¿qué desea?

- Tráeme a Sasuke, tengo una misión para él, ya que estos idiotas no pudieron

- ¿Seguro será buena idea Orochimaru-sama?, creo que ahora no es el momento adecuado para dejar a Sasuke sólo, han dado orden de caza para el muchacho, sin mencionar que he visto por aquí cerca unos cuantos mirones

- Exacto, por eso mismo es el momento adecuado Kabuto, sólo tráelo

- Hm claro, enseguida, mi señor - contestó el mencionado, no muy convencido, pero eran las órdenes de su líder.

- ¿Qué quieres Orochimaru? - mencionó un chico algo malhumorado.

- Oh vaya, Sasuke, llegas en buen momento - dijo Orochimaru muy complacido de ver a su alumno favorito.

Sasuke Uchiha, un ex-shinobi de Konoha, caracterizado por su cabello azul y el mal humor que siempre se carga, es ahora buscado por las cinco Grandes Naciones Ninja. Éste se fue hace 3 años y unos cuantos meses de su aldea, para seguir a Orochimaru y así conseguir su ansiado poder y vengar a su clan.

- ¿Qué quieres Orochimaru? - repitió con más molestia el chico por sentirse ignorado, cosa que nadie debía hacer.

- Sasuke, tranquilízate, va amaneciendo y ya andas de tan mal humor... - dijo el líder en un tono burlón.

- Hmp

- En fin, ya sabes lo que quiero y ya que los ninja que mandé no pudieron con la misión es tu turno

- ¿Para qué necesitas el Byakugan?

- Es información que por el momento no necesitas saber...

- Quiero saberlo y lo quiero saber ahora

- Hmm, bien, bien, toma calma, creo que se me acaba de ocurrir algo - le dedicó una sonrisa sarcástica a su alumno, y éste maldijo por haber insistido, pues esas 'ideas espontáneas' en la mente de su líder, significaría más trabajo, bueno, nada con lo que no pudiera lidiar, es decir, él era Sasuke Uchiha, no hay imposibles para él.

Pero el chico de cabello azul nunca se habría imaginado lo que Orochimaru estaba a punto de pedirle

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Empezó a abrir sus ojos y comenzó a visualizar el espacio donde estaba y de pronto le vinieron como flashbacks de lo que había acontecido anteriormente. Ella. La Hokage y su asistente entrando. Ella acomodándose su ropa. Unas manos suaves y a la vez firmes, una voz de tono afierado y a la vez angelical. Y de pronto nada.

Miró hacia la ventana y ahí se encontraba un chico de cabello largo, supo de inmediato quién era. Podría reconocer su figura donde fuese. Estaba recargado en la ventana.

La chica trató de sentarse en su cama, haciendo sonidos que le eran totalmente perceptibles al chico castaño, el cual se acercó enseguida a ella e impuso su brazo izquierdo delante del pecho de su prima para impedir que ésta siguiera moviéndose. Ella al instante se sonrojó, pero agradeció que la luz estaba apagada, pues así su primo no notaría su vergüenza.

- ¿Ne-neji-niisan?

- Hinata-sama, no se mueva, por favor

- ¿Pero, po-por qué niisan?

- Sólo... se lo suplico, no se mueva

A Hinata no le quedó más opción que asentir y obedecer a su primo. Años viviendo con él... ya sabía que su niisan no cederían tan fácil si no mostraba interés de querer hacerlo a la primera.

Para suerte de Neji, Hinata era sumisa y aceptaba cualquier petición de él, pues desde que Neji le juró lealtad, ella la aceptó muy amablemente y desde entonces él ha procurado por la vida de ella, mejor que su padre, y al sentir esto, ella decidió que seguirlo no era mala idea.

Ella se recostó nuevamente y Neji volvió a tomar una posición firme.

- Hinata-sama, ¿cómo pasó?, ¿qué ha sucedido?

- Hmm - fue el único sonido que emitió tratando de recordar.

De repente todo le llegó como un golpe al estómago, el cual también la hizo reaccionar haciendo que recordara que no había comido nada desde el día anterior por la mañana y estaba sintiendo mucha hambre.

Pero dejando eso de lado... "Naruto", pensó, entonces sus ojos amenazaron con dejar salir lágrimas, haciendo que ella pasara el brazo por sus ojos, tratando de reprimirlas. Este hecho capturó el total interés de Neji en querer saber qué era lo que estaba sucediendo.

- ... no fue nada Neji-niisan, no hay de qué preocuparse, creo que Lady Tsunade sólo está exagerando, un simple encuentro con algunos ninjas - dijo la chica de ojos perla, tratando de sonar convincente, pues si se atrevía a contarle la verdad, quién sabe de qué era capaz su querido niisan.

"¿No tartamudeó?, demonios Hinata. Claramente está tratando de ocultarme algo", pensó el castaño.

- Hmm ya veo... y bueno, ¿le gustaría contarme ahora lo que realmente pasó?

Hinata se apenó, ya veía venir el hecho de que él no le creyera, es decir, Neji era Neji, y ella era muy mala mintiendo.

- N-nii-san - dijo en un tono apenas audible y con una voz que amenazaba que en cuanto dijera otra palabra, rompería en llanto.

En cuanto escuchó que se le mencionó, sintió como si una daga estuviera a punto de perforar su corazón; rápidamente se acercó más a ella, sentándose en el borde de su cama y tomó la mejilla de la chica con su mano derecha, alzó su rostro y ahí estaba... una mirada perdida en la tristeza, aunque estaba el cuarto oscuro, la luz que emanaba de fuera permitió ver esos ojos que tanta alegría le traían, pero ahora no, no como lucen actualmente; y así fue como la daga terminó perforando.

- ¿Confía en mí?

Ella asintió y se decidió a hablar.

- V-verás niisan...

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CONTINUARÁ...

Foto: Sasuke Uchiha

ELLA ES MÍA (GaaHina) [EDITANDO DESDE HOY 10 DE FEB, 2022]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora