Capitulo 11: Vuelta a casa

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Volteo para ver que sucede esta vez y observo que es el mismo borracho que me agarró de la
cintura la vez pasada ganándose un puñetazo de Landon.

-¡Que me sueltes condenado!- grita Nina intentando soltarse del agarre de ese asqueroso ser.

Camino decidida a ayudar a mi
amiga, por el rabillo del ojo puedo ver como Landon y Rubén se acercan a paso rápido a ayudarla. Que Rubén en especial le "salve" del borracho sería muy romántico. Freno para dejar paso al "macho" Landon y el "Romeo" de Rubén.

-¡Marrano! ¿te gusta atacar a las chicas? te voy a enseñar lo que pasa cuando tocas a una de
mis amigas imbécil- grita Liria subiéndose en la espalda del borracho. Juro que esta escena
hace que me ría como foca retrasada por dos razones, la primera por la reacción de mi
amiga, ella no está acostumbrada a lidiar con estos borrachos y la segunda, pensé que esto sería como en los cuentos. El caballero se acerca a ayudar a la damisela en peligro, también pensé que el caballero Rubén lo haría.
Por lo visto la caballera Liria se le adelantó.

-Ya Liria déjalo, aprendió la lección- dice una Nina muerta de la risa.

-Creo que te deje bien claro que no podías regresar por aquí- habla esta vez Landon cogiendo al borracho del brazo- tú y yo vamos a hablar afuera- le dice sacándolo con ayuda de Rubén.

-¡Landon!- se gira- no le lastimes- le pido. Sé que es un estúpido pero no está en sus sentidos.

-No te prometo nada- dice saliendo del gimnasio.

-¿Qué fue eso caballera?- digo dirigiéndome a Liria.

-¿Qué fue el qué?- me responde mientras alisa su camiseta.

-Enserio, echaba de menos a la Liria agresiva-dice Nina abrazándola y riendo.

-No hace gracia- dice, ésta enojada.

-Si hubieses visto tu cara y la del borracho te la haría- digo riéndome, las dos no tardaron en acompañarme en las risas.

Un poco de perfume y... ¡listo!
Observo mi rostro en el espejo, voy sencilla y cómoda, dos palabras muy comunes en mi
vocabulario. Mi vestimenta consta de un jersey navideño que me regaló Natalie el año pasado de color rojo con dibujitos navideños, mis jeans verdes ajustados y mis botas negras junto con mi chaquetón de pluma negro. Mi pelo esta suelto y natural, esta vez me maquillé un poco por la apariencia... después de casi dos años volveré a ver a mi familia, no puedo parecer una zombie.

-No quiero volver- lloriquea Liria tirándose boca abajo en mi cama.

-Liria, sabes que si quieres , verás a tu familia-le digo sentándome al lado de su cuerpo desparramado en las sabanas con mi móvil en la mano. Me meto en el juego de Candy Crush y comienzo mi partida, este juego es realmente adictivo.

-Esa es la razón por la que no quiero ir- vuelve a lloriquear.

-Siendo sincera yo tampoco quiero ir- lloriqueo con ella- es mejor aquí, sin mandamientos ni normas.

-Confirmado, nos quedamos- dice Liria cruzándose de brazos y sentándose en forma de india. Ahora que no está como muerta en mi cama puedo ver que va vestida igual que yo pero su jersey es verde y lleva un vaquero ajustado con sus botines verdes. El jersey también se lo regaló Natalie, de echo también se lo regaló a Nina, solo que los tres de diferentes colores.

-Vamo chicas, se nos irá el avión- dice Nina una vez dentro de mi habitación ya no tan mía ya
que duerme en ella todo el mundo que viene.

-No vamos- dice Liria.

-¿Cómo que no vais?

-Pues que no vamos, pasamos de normas- digo esta vez yo.

-No digáis bobadas y levantaros, Natalie también estará y se enfadará si no vais- dice mirándose en el espejo. Su estilo es muy diferente al nuestro, lleva un vestido beige con dibujos navideños de color marrón que le llega a las rodillas y es suelto y unas botas marrones altas que le llegan a las rodillas también. Su
pelo está suelto y completamente liso.

-Cierto, Liria tenemos que ir, aunque sea por Natalie- le digo levantándome.

-Sigo negándome, que venga ella- dice con su cejas fruncidas.

-Es verdad que venga ella- la apoyo sentándome a su lado de nuevo.

-Dios... dame paciencia por que si me das fuerzas las mato- dice Nina mirando el techo-como no os levantéis tendréis que ateneros a las consecuencias.

-No podrás movernos de aquí ni con un cañón de guerra- dice Liria.

-Si- le sigo.

-Din, don, din... Pasajeros del vuelo 5 con destino a Málaga. Su
vuelo está a punto de salir, dirinjanase a la puerta que hay a vuestra derecha, gracias.
La voz de la chica hace que me sobresalte.
Finalmente estamos por coger el vuelo de vuelta a casa, sí, sé que no nos movería ni un cañón de guerra, de echo no hizo falta ninguno ya que solo le hizo falta bajar a la casa del vecino y pedirle su perro. No sé vosotros pero lo primero que hice yo por el bien de mi vida fue coger mi maleta y salir de ahí como alma
que lleva el diablo.

-Me las vas a pagar- le dice Liria a Nina.

-¿En serio salisteis por un perro?- pregunta Patrick.

-Ni que lo dudes- contesto.

-Muñequita, lo miedica no te lo quita nadie- me dice a lo que le saco la lengua.

-Os voy a extrañar- dice Estiven- como no volváis dos días después de navidad os despido ¿entendido?

-Si mi capitán- digo llevando mi mano derecha a mi frente como los soldados.

-Así me gusta soldada- dice este burlón.

-¿Soldada?- pregunta Liria riendo.

-Tú di que si- habla esta vez Nina, reímos.

-Nos vemos Bob- le abrazo mientras que las chicas abrazan a Patrick, me separo de él y me
dirijo a abrazar a Patrick, haciendo un cambio con las chicas que ahora abrazan a Esteven- te voy a extrañar Congui.

-Yo más muñequita- dice besando mi cabeza.

-¿Para mi no hay abrazo?-pregunta la voz de Landon.

-Has venido-digo lanzándome a sus brazos.

-Claro que si brujita, ni que hubiese más brujas a las que abrazar en mi vida- dice burlón.

-Si te digo quién es la bruja de verdad te vas a enfadar- digo riéndomñe.

-¿Quién?

-Pues...- la voz de Nina me interrumpe.

-¿Qué haces aquí?- pregunta Nina con tono autoritario y ¿enfadada? Liria frunce su cejas y mira fulminantemente al sujeto con el que habla Nina.

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