Capitulo 5

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Unas gotas caen en mi cuerpo, unas gotas muy frías para mi gusto, mi mirada me pesa y no puedo abrir los ojos, más bien no quiero—vamos Harry—me digo a mí mismo en mi mente—tú puedes—repito en mi mente.

De un momento a otro veo un abanico dando vueltas, un dolor en la cabeza hace que me lleve la mano a mi frente, me sobresaltó al sentir una fina tela y pasó mis dedos por encima de esta, mi mano toca la tela pero hay un punto algo húmedo en esta, me tenso al tocarlo ya que un dolor invade todo mi cuerpo—no lo toques—dice una voz masculina y me da un manotazo.

Yo quito mi mano enseguida— dolió—digo y me siento y puedo ver a una maraña de pelo rojo intentando cerrar la ventana por la lluvia—¿Qué horas son?—digo y Mike se voltea—temprano—suspira.

—siento que e dormido horas—digo y el me sonríe—son las cuatro de la mañana Harry—dice el y yo me levanto de la cama ¡mi padre va a matarme! Intentó mantener la calma pero se me es imposible—¡me tengo que ir!, adiós—digo buscando mis pertenencias, alguien me toma del hombro—tú no irás a ninguna parte—dice Mike y eso hace que yo me enoje—tú no eres nadie para decirme qué hacer—digo con el tras mi espalda.

El suspira—Harry no te dejaré ir, comprende esta lloviendo, tienes una herida en la cabeza, no has comido, dejarte ir es un boleto hacia la muerte, seguro—dice el y yo solo bajo la cabeza—eso sería lo mejor que me podría pasar—digo y el apretón de mi hombro se vuelve más intenso—vete—dice serio, yo tomo mis cosas y me dirijo al elevador, aprieto un botón de este, pero no responde, —Mierda—digo y él se ríe —no hay luz—dice el tranquilo y mi dolor de cabeza vuelve.

Yo lloro por el dolor—tú, es que tú no entiendes papá me matara si no llego—me da un escalofrío de solo pensarlo, el al verme su cara cambia—Hey te prometo que aremos algo—dice y me abraza, yo dejo que su calor me cubra.

Siento que algo escurre en mi frente y volteo a ver a Mike—mierda—murmura el y se que algo va mal—ven Harry te voy a curar—dice el y me toma de la mano.

Tomo mi celular con la otra y checo mi teléfono  y tengo puras llamadas de Alison, suspiro, decido regresarlas, el teléfono no tiene que sonar más de una vez ya que la voz de Alison retumba en mis oídos— HARRY ¿DÓNDE ESTÁS?—grita ella, mientras Mike me sienta en su cama.

El se va al baño—estoy en un hotel por qué la lluvia me agarro—digo y escucho como suspira—tu padre me hablo y le dije que te quedaste en mi casa—dice ella y siento que puedo respirar —gracias muchas gracias te debo muchísimo—digo y ella se ríe, Mike me quita la venda de la cabeza y empieza a limpiar la herida—puedes pagármelos con besos—dice y mi sonrisa desaparece.

Suspira e ignoro el comentario—gracias por todo Alison—siento como Mike aplica presión a la herida—no tan fuerte—le susurró y el solo voltea los ojos ¿por qué ese cambio de actitud?—bueno té veo al rato, Harry la cena es a la siete, adiós—dice y cuelga ¡la cena! me había olvidado de la cena.

Mike sujeta la venda en mi cabeza —ya está—dice y me suelta —¿por qué estás enojado?—me atrevo a preguntarle, el solo voltea los ojos—por nada Harry, ahora tú quédate en esa cama y yo iré por algo para que comas—dice y Dios se ve que está enojado al pronunciar esas palabras.

Yo me acuesto en la cama y me volteo a ver no traigo playera y estoy en jeans, necesito algo más cómodo, me paro y me dirijo al armario de Mike y de este tomo una playera y un pants para poder acostarme.

Me desabrochó el cinto y me bajo los pantalones y al estar solo en bóxer me veo en el espejo que tiene el cuarto, puedo contar mis costillas sin esfuerzo alguno—Harry hice unos emparedados, espero y te gusten—dice Mike entrando al cuarto, yo me volteo y el no dice nada—yo lo siento, no sabía que te estabas cambiando—dice el tragando saliva y desviando la mirada, yo me pongo rojo de la vergüenza y me apresuro a vestirme.

La playera y el pantalón me quedan algo grandes—tome ropa tuya, espero y no te importe—digo sin levantar la mirada—no te preocupes, está bien—dice el y me entrega los emparedados—gracias—susurro.

El no dice nada y yo prosigo a darle una mordida al emparedado, al sentirlo en mi boca y caer dentro de mi cuerpo, me mareo por no haber comido nada en horas.

Termino de comer y dejo el plato aún lado—quieres dormir—dice Mike y yo asiento, estoy realmente cansado y adolorido—iré por unas mantas—dice y sale de la habitación, siento la cama, esta fría y no tiene marcas de que alguien aparte de mí se haya acostado en semanas.

Al regresar Mike con las sabanas lo miro fijamente—nunca duermes aquí ¿verdad?—cuestionó y el desvía la mirada—mi trabajo es primero—dice el, ¿en qué trabajará?— ¿en qué trabajas?—pregunto y él se ríe—eso a ti no te incumbe—dice y yo volteo los ojos.

Mike se acerca a la cama y yo abro los ojos aún más —¿te dormirás aquí?—digo y él me sonríe —es mi cama y tengo el derecho a dormir en ella—dice el y yo me bajo de esta—me dormiré en la sala—digo y él se ríe—duérmete aquí Harry no te are nada que no quieras—dice el y me recorre un escalofrío al escuchar su voz.

Yo suspiro y me encojo de hombros—esta—esta—bien—logró decir y él se acerca a la cama yo me acuesto dando la espalda y siento como su cuerpo se hunde en esta—se siente tan bien poder descansar—dice el y yo le queda callado y voy cerrando los ojos, y por fin me dejo llevar por los brazos de Morfeo.


Siento mucho calor en mi cuerpo al abrir los ojos, pero es un calor agradable, volteo a mi cuerpo y un brazo tiene rodeado mi cintura y una pierna está encima de la mía —mierda—susurro, pero no lo quito me gusta estar así abrazado con ...—Mike—susurro—mande harry—me espanto al escuchar su voz—¿qué horas son?—le preguntó y el despega su brazo de mi cintura y saca su pierna sin decir nada al respecto de eso—son las once—dice el y yo suspiro y me quedo en la cama ahí acostado a su lado.

El pone su cara arriba de la mía y sonríe —¿te quieres quedar un rato más?—dice el y me río —¿por qué no?—me encojo de hombros y el asiente —entonces es un sí—nunca había visto una sonrisa tan grande en su rostro—si idiota es un sí—le digo y él solo niega con la cabeza.

Y mi corazón comenzó a latir más rápido, —esto no está bien—digo en mi mente y yo solo me dejo llevar por el momento, eso no importa ahora.

Mike Where stories live. Discover now