¿A quién eliges​?

5.

Sakura se terminó de trenzar el pelo justo cuando Rika llamó a su puerta. Esta vez, su amiga y compañera de clases había decidido llamarla para ir juntas al parque de atracciones, ya que Miko iría en coche.

Agarró el bolso y bajó las escaleras para despedirse de su madre y abrir la puerta.

- Sakura-chan, estás guapísima - le dijo su amiga.

La nombrada se miró a sí misma. Llevaba un vestido de un de tonos pastel que le llegaba algo por encima de las rodillas, unas sandalias, un bolso rosa en su hombro y un sombrero en su cabeza para protegerse del sol.

Su amiga también había optado por un vestido, éste era azul y lo llevaba junto a unos zapatos...

- Rika-chan, ¿No llevas ningún bolso? 

-¿Para qué? Conseguiré que Rokudo-kun o Tsubasa-kun me paguen la entrada y la comida.

La chica de las trenzas negó con la cabeza mientras ambas se ponían a caminar. Ese día era un sábado soleado sin rastros de nubes, una leve brisa recorría las calles refrescando el ambiente mientras su amiga le contaba la última historia que había escuchado de fantasmas.

Nunca entendería porqué le gustaban tanto las historias de fantasmas pero, cuando pasaba algo paranormal era de las primeras en irse corriendo.

Poco a poco llegaron a la entrada del parque de atracciones, que estaba llena de gente, y empezaron a buscar a sus amigos. Sakura fue la que dio con ellos, estaban todos sentados en un banco a la sombra de un gran árbol.

Miho se acercó a darlas un abrazo mientras Rinne y Jumonji se quedaban de pie, ambos tenían expresiones completamente distintas, el primero parecía querer empezar a llorar sangre y el segundo portaba una sonrisa de oreja a oreja.

- Vamos Mamiya-san, vamos a comprar las entradas - habló mientras se ponían en la cola.

El exorcista iba el primero, después Rika, Miho y Sakura y por último el pelirrojo.

Nada más entrar Miho y Riko arrastraron al grupo a una cola en la montaña rusa, después a la tacitas, después a comer algodón de azúcar y por último a subirse a la noria.

Tsubasa había estado llamando la atención de la chica de las trenzas a toda costas, comprando comida y alejándose de los juegos similares a donde falló en conseguirle un peluche a la joven.

En cambio, Rinne se había pasado la velada ausente y murmurando cosas como: "Las cosas gratis son las mejores". Cuando la chica que ve fantasmas decidió mirarle se encontró con que Rokumon estaba en su hombro. Los ojos rojos del shinigami cruzaron con los de ella.

- Ha dicho que quería venir y, como nadie le ve...- respondió a la pregunta que se acaba de formular en la cabeza de la adolescente

Ella asintió y el gato sonrió mientras se acercaba a ella.

- Sakura-sama, tiene razón, después de ver a Rinne-sama junto a Jumonji me he dado cuenta de que no actúan de manera normal...

El nombrado se acercó a ellos 

- ¿Qué dices gato? No tengo nada que ver con Rinne, no estamos actuando igual

- Es verdad Rokumon, no nos parecemos en nada.

Y juntos ambos le dieron un golpe en la cabeza al gato, haciendo que llorara y corriera a los brazos de Sakura. Entonces el gato negro levantó la mirada hacia la muchacha y sonríe:

- ¡Sakura-sama lo recuerdo todo!

- Debe de haber sido el golpe - comentó el exorcista.

- Jumonji y Rinne-sama fueron a buscar un fantasma juntos... el fantasma nos contó que nunca se declaró a la chica que amaba y nunca tuvieron una cita - explicó Rokumon- Así que la pareja se fue de la casa cuando llegamos nosotros, Jumonji apareció después... se empezaron a pelear y el monstruo los hechizó antes de exorcizar. Y en ese momento me empujaron, me caí y me hice un chichón, pero ¡Pasó así, Sakura-sama!

Ella asintió mientras, con su amigo en brazos acudía a la llamada de sus amigas. El joven ojizarco suspiró mientras miraba al pelirrojo.

- Hagamos... como si esto no hubiera pasado...- dijeron a la vez viendo cómo su amada Sakura se alejaba de ellos.

FIN.

Pues nada, aquí acaba el fic, ya dije que sería cortito y la verdad estoy contenta con el resultado. Estoy pensando en hacer más pero primero quiero subir algunos de Inuyasha.

¡Nos leemos!