I believe you

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Narra Ada:

En la actualidad

- No, no- gritó un hombre.

- Por favor- sollozó la mujer-. No les hagas daño.

Y esa horrible voz empezó a reír.

Me desperté sobresaltada.

"Joder otra vez esa maldita pesadilla", pensé frustrada.

Fui hacia la mesita y cogí mi móvil me fijé en la hora y me puse una mano en la cabeza.

- Pufff, mátame.

- No, hombre, que si no me quedo sin hermana- dijo esa voz tan conocida detrás de mí.

- ¿Qué haces despierta a las 7:30 de la madrugada?- le pregunté cansada.

- Nada, que me he desvelado- me contestó-. Espera, ¿has dicho las 07:30?

- No, mira, me estoy quejando por nada- dije con ironía.

- Yo que sé, como tu siempre te quejas por todo- puso los ojos en blanco.

Le tiré la almohada en la cara y me empecé a descojonar de la cara de sorpresa que puso.

- Ah, ¿sí? Ahora verás- dijo amenazante con su típica sonrisa.

- Venga, a ver si me ganas- le reté.

Y así comenzamos una guerra de almohadas entre tantas carcajadas, pasaron las horas hasta que ella me soltó.

- Ada...- dijo insegura.

- Sí, ¿Kylie?

- ¿Tú crees en la magia?- me preguntó nerviosa.

- Kylie, ya hablamos de eso.

- Ya, pero si existiera, Ada...- hablaba con ese brillo en los ojos que tienes cuando sigues creyendo en algo, cuando aún tienes esperanza-. Yo sé que existe y está por todo el mundo. Sólo tienes que tener fe.

- Otra vez, has leído, ese estúpido libro- contesté harta del tema.

- No es un estúpido libro, y no es un libro cualquiera. Es un libro en que cada personaje existe- se defensó ella.

- Por favor, Kylie. Esos son cuentos de hadas- dije riéndome-. No existe, no puedes creer en eso ni en la magia. Ya no eres una niña.

- Sí que existe. Lo que pasa es que no tienes fe. Por favor, Ada, ten fe. Tienes que creer en ello- dijo suplicando.

Ella fue hacia su mesita y cogió un libro donde en su portada se podía apreciar las letras que constituían el título del libro: Érase una vez.

Kylie se puso a mi lado y me abrió el libro.

- Lo ves- me mostró una página donde se hallaba Blancanieves y el Príncipe azul-. Ellos existen. No sé dónde están, pero sé que están. Y cuándo los encontremos tendrás que creer en mí- dijo muy segura de sus palabras.

Me descojoné ante lo que decía.

- ¿Esto es enserio, Kylie?

Ella me miró con cara de decepción.

- Cuando descubra dónde se ubican no reirás tanto- dijo a punto de llorar.

Kylie cogió el libro y se fue al piso de abajo llorando.

- Kylie, espera- me sentía culpable.

Bajé abajo para buscarla pero para mi sorpresa no se hallaba Kylie si no Mireia, Zac y unos hombres super fuertes y altos que no les había visto en mi vida. Quim y Míriam estaban conversando con ellos mientras mi mirada se dirigió a Mireia y Zac que los tenían capturados.

No Pierdas La EsperanzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora