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El regreso a casa es silencioso, Ryeowook suspiró mientras recordaba las palabras de Jung Ki, eso le preocupaba, no sabía de qué era capaz y teniendo en cuenta lo que hizo la primera vez donde logro lo que quería temía a que su venganza fuese más peligrosa. Era evidente que debía preocuparse, no solo por su bienestar sino por el de Jong Woon, no se perdonaría si algo malo le llegase a suceder y tampoco quería volver a perderlo, suficientes cosas habían pasado a lo largo de los diez años que perdieron juntos como para que ahora la vida volviese a colocarlos a prueba.

Estaba muy preocupado, las amenazas de Jung Ki no parecían una broma y sinceramente no sabía qué hacer.

El auto se detuvo, sintió la mano de Jong Woon sobre la suya y lo miro, Jong Woon seguía conociéndolo bien, sabía que estaba asustado, que tenía miedo y con mucha razón. Ryeowook ya había pasado por bastante, sus lágrimas, las noches sin dormir, su poca autoestima, todos eso factores negativos que vinieron con el divorcio, el dolor, la herida de una infidelidad, no eran cualquier cosa.

Pensaba que había escogido a una buena persona, Jung Ki siempre hacia lo posible por sacarle una sonrisa, por hacerle olvidar lo malo que había pasado y lo apoyo en todos sus proyectos futuros, solo para que al final fuese un mentiroso, el causante principal de toda su desgracia.

¿Por qué simplemente no lo podía dejar en paz?, Wook nunca le dio ninguna esperanza antes de que sucediera lo de su matrimonio, trataba de alejase de él lo más que podía porque no quería mas discusiones con Jong Woon y aun así termino obteniendo lo que deseaba al lograr que su matrimonio se fuese a la nada.

― No te preocupes pequeño—susurró Jong Woon consolándolo, sonriendo de una manera sutil pero Wook sabía que no era cierto, Jong Woon estaba tan preocupado como él, solo quería parecer más tranquilo para que no se culpara de la situación

― Woonie, no puedo evitarlo, Jung Ki puede aparecer en cualquier momento y no sabemos que pretende, si algo te llegase a suceder...

― Nada me va a suceder a mí

― Eso no lo sabes, ninguno de los dos sabe lo que pretende y no puedo evitar estar asustado

― ¿te ha intentado contactar antes?—Wook negó

― No desde que termine con él el día de la boda, Jung Ki parecía convencido de que lo odiaba pero está obsesionado, el tipo de obsesión que hace a las personas crueles. Es capaz de lastimarte, capaz de hacerme daño a mí—su cuerpo tembló, ¿y si lo lograba? ¿y si volvían a separarse?

― Vamos a intentar calmarnos un poco

― No puedo Woonie, no puedo calmarme—observó sus brazos aun rojizos por el esfuerzo, Jung Ki no estaba jugando, no lo estaba haciendo

― Iremos a casa, dormiremos tranquilos y pensaremos en una solución

Asintió sin mucho ánimo, una solución parecía imposible en ese momento, justo cuando su vida comenzaba a tener un orden de nuevo, a parecer que todo era correcto vuelve a aparecer. Desde el inicio Jung Ki fue causante de los problemas entre ellos, siempre seduciéndolo, siempre asegurando que lo amaba más que cualquier otra persona. Sin embargo eso no era amor, era una obsesión que había sobrepasado los límites, se podría definir como una obsesión enfermiza, eso era lo que le pasaba a él.

― ¿tienes hambre?

― No Woonie, quiero ir a dormir si no te molesta

― Entiendo, debes estar muy cansado, tranquilo, iré en unos minutos a acompañarte—el castaño no dijo nada más, se dirigió a su habitación y se colocó un pijama antes de acomodarse en la cama cubriéndose con el edredón.

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