Estábamos en el parque de diversiones, ya había avisado en mi casa que llegaría tarde. Habíamos comprado boletas VIP, podíamos pasar a todos los juegos sin hacer fila y sin necesidad de comprar boletos.
Fuismos a los carritos chocones, hicimos una especie de competencia de quién chocaba más carros. Obvio gané yo, Jimin estaba decepcionado de perder.
En la rueda de la fortuna estaba muerto de miedo, yo solo reía como loca.
-De verdad no sé por qué quisiste subir aquí, ¿y si morimos?- mi risa era incontrolable, me movía mucho y eso lo alteraba más, cuando bajamos casi besa el piso.
Llegamos a la rueda de fuego, atracción que da varias vueltas de 360 grados. Esto será intenso.
-Cuanto a que eres el primero en vomitar- lo rete con la mirada.
-El que vomite primero hará todo lo que el otro diga por el resto de la noche- su sonrisa me hizo dudar un segundo, pero conociendo el estómago de mi novio yo ganaría.
-De acuerdo- corrimos a la atracción, una vez ya sentados y listos nos tomamos de las manos, cuando la atracción empezó a subir todo iba bien, ibamos a mitad de camino cuando el juego bajó drásticamente, los gritos no tardaron en oírse, sentí mi alma quedar detrás mío, apreté aún mas la mano de Jimin, este se sentía frío, y estaba temblando, el juego dio tres vueltas de esta manera y sentí que paró, estaba mareada, y al abrir los ojos encontré tremendo panorama. Todos estabamos de cabeza. Empecé a reír y en ese momento volvieron a dar la vuelta despacio, una vez ya en nuestra posición inicial nos fueron sacando uno a uno.
Ibamos caminando fuera de la atracción, Jimin no tenía la mejor cara del mundo, iba tambaleante, y se detuvo en el primer bote de basura que vio.
-¡Ja! Gané- empecé a saltar de la alegría, este me miró raro y sacando una menta de su bolsillo la depósito en su boca -Cómo me gustaría ser esa menta- el comentario salió de mi bica sin siquiera procesarlo.
Este miró a mi dirección divertido, se acercó y me tomó de la cintura con una mano, la otra tomó mi rostro y lo acercó al suyo, me miró unos segundos y luego me besó, un beso humedo, lleno de una pasión y tensión que nunca había sentido, el sabor a menta de esparcia por nuestras vocas. Su lengua bailaba con la mía.
-Me encantan esos besos- sonreí estúpidamente al igual que él.
Caminamos a los puestos de comida donde compramos un algodón de azúcar.
-¿Dónde iremos ahora Farah?-
-A los carruceles, no dejaré que vuelvas a vomitar- caminamos hablando de disparates, ibamos muy distraídos, tanto que el no se percató de la pareja delante de nosotros.
-Crystal y Chen- mi voz sonó baja.
-¿Qué harán aquí?- Jimin sonaba curioso, yo solo quería evitarlos, pero era tarde, Crystal nos había visto. Ignoró que estuvieramos ahí y siguió su camino con Chen.
Subimos al carrusel, era demasiado hermoso, caballos de madera en colores pasteles, y los tubos dorados, una luz dorada y tenue adornaba todo, parecía una escena romántica, la cuál fue interrumpida por el teléfono de Jimin. Este sacó el celular de su bolsillo y quedó largo rato mirando la pantalla, la llamada había caido y volvió a entrar.
-Contesta, debe ser urgente- este me miró y saltó del carrucel, yo di una vuelta más en lo que terminaba su llamada. Al terminar lo vi sentado mirando a la nada y sonriendo.
-¿Qué pasó?-
-Mi padre está furioso porque no le avisé que llegaría tarde, eso es nuevo, pero creo saber quién fue- se levantó del suelo y me besó, uno profundo pero está vez con amor.
Una Crystal no muy feliz venía caminando sola, ¿dónde estaría Chen?
Ella y Jimin cruzaron miradas, no muy buenas, pero lo suficiente para saber que él sabía que era culpa de ella, solo espero que a partir de ahora todo se arregle.
-¿Sabes qué? Como mi padre esta furioso y quiere que vuelva a casa, me dijo que fuera con la señorita que me esta distrayendo últimamente- abrí los ojos como dos faroles.
No estaba lista para conocer a su padre, pero me hacía feliz que él estuviera emocionado por eso.
//HOLAAA, les dije que iba a actualizar, pues ya empezamos, las amo, y espero que sigan leyendome//
Sookyo~
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El Chico Del Pelo Naranja. [p.jm.]
FanfictionNo se supone que pasara así, las cosas no están siendo faciles para nadie en esta escuela, pero al parecer enamorarse y romper corazones está de moda. Cuando entro el chico nuevo los corazones rotos aumentaron y perfectamente se que le ven, tiene u...