Kidnap my heart || Harry Styles.

(Capítulo 5)

                                                   'Mi nueva vida con él'

Narra Jenna.-

Cuando Harry salió, fui a la heladera y vi que había una caja de pizza con 6 porciones. Agarré una servilleta, una porción de pizza y me senté en el sofá. Mientras comía, pensaba en Harry, una parte de mi mente solo me recordaba el echo de que el me había secuestrado y otra parte de mi mente, solo me hacía recordar lo que sentí cuando me vio casi desnuda. Tan solo habían pasado dos días, desde que mi vida dio un vuelco terrible, dos malditos días y no podía dejar de pensar en su hermosa sonrisa! No entiendo que es lo que me pasa, maldita sea. 

Terminé mi pedazo de pizza, y ya no tenía hambre. Me quedé en el sofá, pensando por un rato, hasta que tuve sueño y decidí irme a dormir.

Me desperté por la madrugada, al sentir como la puerta se abría.

- ¿Harry? ¿Eres tú? - dije con voz ronca.

- Somos tus principes ahora preciosa. - dijo una voz que desconocía.

Pude ver, como dos hombres se adentraban en la habitación y se lanzaban encima mío. Trate de defenderme, pero tenían demasiada fuerza. Empezaron a besarme el cuello, a golpearme y a despojarme de mis ropas. Quise gritar, pero uno de esos hombres puso su mano en mi boca, impidiendo que mi voz salga. Cuando ya me habían dejado en ropa interior, ellos se empezaron a desabrochar los cinturones y a sacarse sus camisas. Sabía que era lo que seguía, iban a abusar de mí. Grité, grité y grité hasta que mi garganta ardió y cuando mis esperanzas se estaban perdiendo, vi a Harry entrar a la habitación, su cara era de preocupación, pero cuando vi que era lo que realmente sucedía, no sabría explicar sus emociones. En sus hermosas gemas verdes, se reflejaban odio, tristeza y furia. 

- ¿¡Que diablos, hacen malditos hijos de putas!? - Dijo Harry furioso.

- Se-se-señor, es qu-que - Tartamudearon los guardias mientras me soltaban y se ponían sus ropas. 

- ¡Los voy a matar, fuera de aquí! - Harry los apuntó con un arma, y ellos salieron de la habitación, y se fueron corriendo del apartamento. Harry los siguió para verificar si se habían ido por completo, mientras yo no podía contenerme, mis lágrimas salían y salían, sin que yo quisiera. Busqué mi ropa, me la puse y me apoyé en el respaldo de la cama con mis rodillas entrelazadas en mis brazos, los cuales estaban raspados y con muchos moretones. 

- Jenna, ¿estas bien? - Dijo Harry acercándose hacía mi, con los ojos aguosos.

- ¡Por favor, no me lastimes! por favor no - Dije con mi voz totalmente quebrada. 

- Jenna, yo no te voy a hacer daño, jamás te lastimaría - Dijo eso mirándome a los ojos, y supe que era verdad - Ven Jenna, ven - decía eso mientras me entrelazaba con sus brazos y apoyaba mi cuerpo en su pecho. 

Narra Harry.- 

Cuando regresé al apartamento, pude ver que los guardias no estaban, algo andaba mal. Entré al apartamento, y pude escuchar a Jenna gritar, mi cuerpo se tensó. Corrí hacía su habitación, entré y prendí la luz, pude ver a uno de los guardias encima de Jenna sacándose la camisa y al otro al costado de la cama, bajándose los pantalones.

Cuando reaccioné a lo que estaba pasando, quería matarme a mi mismo, por dejarla sola tanto tiempo, si estos malditos le hicieron algo, ¡NUNCA me lo perdonaría! 

- ¿¡Que diablos, hacen malditos hijos de putas!? - Dije totalmente furioso.

- Se-se-señor, es qu-que - Tartamudearon los guardias mientras se soltaban de Jenna y se volvían a vestir.

- ¡Los voy a matar, fuera de aquí! - Dije apuntándoles con mi arma, haciendo que se vallan corriendo, del apartamento. Cuando verifiqué que se habían ido, trabé la puerta y volví hacía la habitación. 

Jenna estaba apoyada contra el respaldo de la cama, llorando entre sus piernas, estaba toda golpeada, con muchos moretones.

- Jenna, ¿estas bien? - Dije tratando de acercarme a ella y de mantener mis lágrimas.

- ¡Por favor, no me lastimes! por favor no - Dijo con una voz quebrada, eso me mató. Verla así, me mataba.

- Jenna, yo no te voy a hacer daño, jamás te lastimaría de esta manera y de ninguna. - dije eso mirando sus hermosos ojos pardos y a sus perfectos labios, lastimados - Ven Jenna, ven - Dije eso, abrazándola con amor, dejando que mis lágrimas caigan sin importarme nada.

Jenna ya estaba más calmada, pero aun seguía aferrada en mis brazos. Pudimos ver, como la luz de la habitación se apagaba. Se había cortado la luz, ¡Mierda! 

- Es mejor, que duermas, necesitas descansar - dije, soltándome y parándome a un costado de la cama - Espero que duermas bien princesa - dije eso, y me encaminé a la puerta cuando la escuche decir mi nombre.

- Harry..no te vallas, duerme conmigo hoy, por favor - dijo con aun lágrimas en los ojos.

- No me iré, me quedaré contigo - Me saqué mi ropa quedando solamente en boxer, y me acosté a su lado, mirándola a los ojos. 

- Gra-gracias - dijo tierna mirándome a los ojos. 

No pude aguantarme más, necesitaba sentir el sabor de esos labios tan únicos. Me fui acercando a ella lentamente, ella me siguió - Jenna - dije juntando nuestras frentes, no me aguantaba más - ¿Si Harry? - dijo ella con la respiración entre cortada. No me aguante más y junte nuestros labios en un hermoso y apasionado beso.