Love or Game [Sophiam] [TERMINADA]

Beautiful Brown Eyes

Al día siguiente me desperté temprano y me di un baño, minutos después mi mamá entró al cuarto

— ¿No puedes tocar?—Pregunté de mala gana, estaba muy molesta con ella

—Baja a desayunar, rápido— Okay ella también estaba molesta, y sabía que ninguna de las dos iba a dar su brazo a torcer, me cambié y bajé con mis maletas… después fui a la cocina y vi un pan tostado con mermelada, un plato de fruta, un vaso de agua de naranja y una malteada de fresa, maldición ¿quiere ponerme en engorda o algo así?

—Te lo comes todo

—Es mucho…

—Te lo comes todo dije—Wow sí estaba molesta… comencé a comer y no pude terminarme todo.

—Vámonos ya

—No he terminado—Dije tratando de hacer tiempo, en serio no quería ir a ese lugar

—No vamos a llegar tarde por tus berrinches—Tomé la malteada y salí de la casa para después subir al auto, mi mamá ya había subido mis maletas.

— ¿No hay nada que pueda hacer?—Pregunté esperanzada

—Nada—Contestó y me voltee hacia la ventana, me puse los audífonos y cerré los ojos. Bueno, mi infierno empezaba hoy.

Después de un rato en el carro, al fin llegamos al “maravilloso” colegio, perdón, cárcel. Mi mamá y yo bajamos y algunos que estaban afuera se me quedaron viendo, ¿qué mierda me veían? Los miré a todos de mala gana y dejaron de verme.

— ¿Ya haciendo amigos?—Preguntó mi mamá de forma burlona

—Claro—Contesté molesta, seguí caminando mientras me tomaba mi eterna malteada, iba distraída cuando de repente volteé a ver a mi mamá y vi que alguien venía corriendo, directo hacia mí.

Sí, un idiota chocó conmigo y me tiró toda la malteada encima ¡PERFECTO!

—Oh por Dios cuánto lo siento

—No me digas— Me ayudó a levantarme y volteé a verlo a los ojos, el también me vio… nos quedamos viendo como por 5 segundos, tal vez más, y DIOS MÍO él tenía unos hermosos ojos cafés me sonrió tímidamente en forma de disculpa y sus ojos se vieron todavía más hermosos.

—Por Dios eres hermoso— Ay no ¿eso lo dije o lo pensé?

—En serio discúlpame, soy un tonto… no te vi— ¡UF! Creo que lo pensé

—Eeeehh— ¿Qué haces Sophia Smith? ¡Reacciona!— ¡Idiota!— ¿Idiota? ¿Qué haces? ¿Por qué le dices idiota?

—Perdóname… te ensucié toda—Se veía apenado

— ¡Imbécil mira lo que hiciste! Me ensuciaste toda mi blusa ¿Sabes cuánto cuesta? ¡Cuesta más que todas las porquerías que traes puestas!

—Oye tranquila… puedo pagarte si quieres

— ¿Pagarme? JAJA—Reí sarcásticamente—Ni ahorrando toda tu miserable vida podrías pagarme esta blusa

— ¡Sophia! Vámonos ya—Escuché a mi mamá a lo lejos

— ¿Eres nueva? Puedo llevarte con mi…

—No necesito nada de ti idiota—Vi al chico de pies a cabeza y me fui con mi mamá

Lo admito, no debí hablarle tan cruel, pero no supe que hacer, me había quedado embobada en su mirada y no iba a permitir que se diera cuenta, no me quedó de otra más que gritarle.

Llegamos a lo que parecía la dirección, mi mamá se presentó con el director

—Mucho gusto, soy Anne Smith

—Geoff Payne para servirle

—Ella es mi hija, Sophia Amy Smith—No era necesario el “Amy”—Sophia, no seas maleducada, saluda

—Hola—Mi mamá me vio casi queriéndome matar con la mirada, yo la ignoré

—Es un honor que nos dé preferencia señora Smith— ¿Este hombre conocía a mi mamá? No pensé que fuera tan reconocida e.e

—Al contrario me da mucho gusto que mi hija pueda estar en este prestigioso colegio, gracias por recibirla— Vaya, vaya con que “prestigioso colegio” no me imagino a las y los niños de mami que voy a encontrar por aquí

—No agradezca, bueno Sophia aquí tengo todos los datos que necesitas, tu cuarto es el número 34, estarás con otras tres compañeras—MARAVILLOSO, estaré con dos barbies— tu casillero es el número 432 y ahorita la secretaria la va a llevar a su salón de clases, ella misma va a llevar tus maletas a tu cuarto

—Wiii— Dije en tono de burla

—Sophia—Mi mamá otra vez comiéndome con la mirada

—Bueno ¿ya puedo irme?

—Claro, vayan con la secretaria, ella te llevará a tu primera clase que está por empezar

—Genial— Salimos de la dirección y ahí estaba la secretaria ya lista para llevarme al infierno

—Bueno hija… cuídate mucho, pórtate bien

—Ajá

—Te quiero…

— ¿Por qué no te vas de una vez a disfrutar tu vida sin mí?— Nunca le iba a perdonar esto

—Perdóname, no quiero que

—No quieres que esté sola ya lo sé, pero ¿Te digo algo? Siempre he estado sola— Me di la vuelta y me fui con la tipa esta que llevaba mis maletas, a los minutos me arrepentí de lo que le había dicho a mi mamá, ella no merecía esto, siempre había hecho todo para que a mí no me faltara nada, pero estaba muy enojada por lo que me había hecho, no sabía si iba a poder perdonarla.