Necesito romance

Desde los cinco años

Me acuerdo que desde que tenía 5 años me gustaban los hombres, hubo una vez en el prescolar que tuve que salir en un baile que no era para mi grupo, pero yo aferrada que quería estar ahí por un niño que se comía los mocos.
Cuando entre al colegio, me acuerdo que a Axel lo besaba en el cachete y decía que era mi novio, incluso lo forzaba para que yo pudiera besarlo y el me empujaba y decia:
-Déjame, odio a las niñas.
Pero no me importaba y siempre a todas horas le daba besos en el cachete.
Mi primer amor fue Omar, no se que le veía en ese entonces pero a mi me gustaba, me acuerdo que el tenía la constumbre de tener una novia y le regalaba un llavero de un delfín de agua con aceite por dentro, era la sensación; cuando te terminaba, te lo pedía para regalárselo a otra persona. Yo tuve ese llavero como cuatro veces.

Pase a primero y un día Luis se me acercó, y al chocar miradas, hubo algo ahí.
Me acuerdo que tiraba mi lápiz con la escusa de que el me lo recogiera y me lo diera en manos, hasta que tuvo el valor y me pidió ser su novia, le dije que si a esos ojos verdes tan hermosos.
Yo me sentaba hasta en frente y el hasta atrás,  un día, el llego corriendo y me robó un beso.
No entendía el significado, pero no sentí feo.

Pasaron dos semanas y se integró una niña nueva al colegio, Abigail.
Mi gran "enemiga", me acuerdo que Luis terminó conmigo por andar con ella.
Tenía que llegar temprano para que ella no les metiera  mierda en la cabeza a mis amigas y me dejarán de hablar.
Pero bueno, pase a segundo y ahora viene Alberto, el era muy imperativo, hacia muchas travesuras. Recuerdo que se bajó los pantalones en frente de mi. Hasta escribió mi nombre en su mochila.
Fui su novia una vez, pero por muy pocos días.
Alexis, se sentaba adelante de mi, me acuerdo que siempre me prestaba sus colores, era como mi mejor amigo y una vez empecé a sentir cosas por el y fui su novia, pero lo termine y me tuvo mucho odio que hasta lloro y no me volvió a hablar nunca.
Pase a tercer grado y empecé a sentir cosas por Alonso, un niño que le gustaba la natación y el fútbol. Nos volvimos novios. Recuero que nos teníamos que dar besos de piquito en la salida y abajo de las bancas de la escuela.
-A la de tres, te incas y te doy un beso.
-Si.
-Una, dos, tres. ¡Corre Alonso!
Y cada quien se iba con sus papas.
Me ponía muy nerviosa y temerosa a que nos fueran a ver.