~Rayos, aún duele. Duele tu ausencia y el hecho de que tu muerte me haya arrancado de tus brazos, brazos que deberían calmarme en momentos de angustia, desesperación y miedo, anhelo conocerte pero..., solo estoy a un paso... De hacerte compañía en donde sea que estés, quizás sea el momento justo. Necesito tu amor, siento que una gran fuerza me hala hacia ti, con la misma fuerza halaré de este gatillo... Sí... ¿No?... Pues... ¿Que demonios estoy haciendo?
Padre no soy tan fuerte como para hacerlo. Quiero estar contigo, pero no puedo. Quisiera ser como tú, una persona venerada por sus seguidores, alguien con voluntad, alguien... Decidido, alguien capaz de actuar bajo presión. No soy como tú.
Quizás, solo quizás, sea como ella. Cobarde, insegura. Oh padre quisiera que estuvieras aquí y me dijeras, con aquella voz "tan imponente" como dicen, lo que tengo que hacer.
¿Por qué no soy como tú? Es la pregunta diaria de la reina Nathalia, y no la culpo.
Cada despreciable segundo de mi vida me recuerda que soy un fracaso, para ser más específico, "el engendro del fracaso", no por ti... Es por... mi madre.¿Debería llamarla así? Alguien quién abandona a su hijo, no es más que una cobarde.
¿Padre, que pudiste apreciar en ella? Me han dicho millones de veces que eras una persona muy inteligente, y no lo dudo. Pero ¿Existe la posibilidad de que te haya engañado?
No puedo creerlo, creo y maquino preguntas que obviamente no serán contestadas.
Sólo espero ser exactamente como tú, apesar de que estoy creando una imagen de ti a bases de referencias.
Sin dejarme influenciar por el pasado de mi madre, trataré de ser como tú..., El hombre más recto, el más justo, el más inteligente; trataré de ser...
"El mejor Rey"~
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Cartas para un Príncipe
Short StoryNotas, vivencias, pistas y fragmentos del amor y el odio. Amor que deja un vacío, imposible de ser llenado, ni por la más sincera muestra de afecto. Y odio que llena a un corazón sediento de venganza. Reclamando con afiliadas garras, las más intensa...