Capítulo 11

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En la residencia Toshinori - Narra Nana

Me encontraba sentada frente al televisor viendo con aburrimiento como pasaban los canales al oprimir el botón. Estaba sola, aburrida y con hambre... mala combinación.

Creí que con la llegada de papá a la ciudad y mi entrada a la academia, esto cambiaría.

Desde que mama fue hospitalizada todo a cambiado.

-Papá suele estar muy ocupado, tal vez debí quedarme con el tío Naomasa...

La puerta de la entrada empezó abrirse dejando ver a mi esquelético padre. El cual, al verme, se sorprendió y oculto algo tras su espalda.

Lo mire extrañada mientras mi cabeza se inclinaba en señal de confusión y, después de un par de miradas, suspire para luego ir con él.

-Bienvenido!- lo recibí con una sonrisa.

-Y..Ya regrese- dijo con una sonrisa nerviosa- no deberías estar dormida?- cuestiono, negué con la cabeza.

-Quise esperarte. Tengo hambre, llegas tarde!- le recrimino con un puchero infantil.

-Sorry, Nana. Traje algo de comer, lo quieres?- me pregunto extendiendo una bolsa de comida rápida.

-Claro que si!- exclame alegre mientras la tomaba y me sentaba en el comedor- pero... y tu?

-No te preocupes por mi. Yo estoy bien- aseguro mientras se sentaba frente a mi.

-Comiste antes? -él asintió- no me estas engañando, verdad?- lo mire y el río con gracia mientras negaba con la cabeza.

-Estoy bien. Come, adelante- le di una ultima mirada y empecé a comer la deliciosa hamburguesa.

-Y... que tienes en esa caja?- pregunte con algo de comida en la boca.

-Nana, que te he dicho sobre hablar con la boca llena- tomo una servilleta y limpio mis mejillas- God... aun eres una niña pequeña.

-Oye! No soy una niña pequeña. Soy grande y muy fuerte, solo mira estos músculos- hice fuerza en mis brazos y le mostré mis ¨músculos¨

-Claro HAHAHA- su risa fue interrumpida por una tos fuerte,

Podía ver rastros de sangre en sus labios.

Yo le quede mirando un momento para luego seguir comiendo. Al terminar nos quedamos en silencio hasta que papá dio un largo suspiro.

-Nana, yo... se que es difícil estar en esta situación. Se que no es fácil para ti llegar a casa y esperar sola mi llegada- lo escuche atenta- Ser PRO-HÉROE no es un trabajo fácil, y menos en mi caso. Tu madre y yo pensamos en regalarte esto cuando fueras capaz de cuidarle. Naomasa fue a buscarlo por mi, espero que te guste y lo trates bien- finalizo mientras me pasaba aquella caja con pequeños agujeros.

Al tomarla se sentía pesada y algo chillaba dentro. La abrí con cuidado y saque una jaula de su interior.

-Es... es un... erizo- susurré sorprendida.

-Que piensas? Te gusta?- me pregunto con inseguridad.

Saque al pequeño animal de la jaula y este corrió desde mi palma hasta mi hombro.

-Es precioso, pequeño y adorable- el erizo ataco mi cuello con las espinas de su espalda- AUCH! También tiene mucha actitud... gracias, papá. Lo protegeré y cuidare con mi vida!- él río para luego levantarse.

Love Crusade (BNHA) HIATUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora