Capítulo 1

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-Cállate, perra!-dijo Tae mientras tiraba del cabello y le escupía en la cara.

Era la tercera vez que ______ se atrevía a contestarle a su esposo, y, no diferente a las otras veces, fue golpeada de la misma forma. 《¿y todo esto fue sólo porque me quedé dormida y no pude darle de cenar? 》se preguntaba mientras un golpe de su mano le marcaba el brazo.

-Para la próxima que te vea de holgazana, las verás conmigo que no me casé con una buena para nada-soltó su agarre-o al menos eso pensaba-susurró. Salió de la cocina, dejándola tiraba, se levantó como pudo y fue por el botiquín. Era doctora así que sabía muy bien tratar sus heridas y darle los puntos necesarios. Cada vez que se trataba sus heridas, no podía evitar pensar en cómo lo conoció.

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-¡Suéltenme!- le gritaba a los enfermeros que lo atendían.

Toda la gente se empezó a unir al bullicio que causaba ese hombre. ______ entró al hospital después de su comida, escuchó los gritos, vio su reloj, en 40 minutos tenía una operación para ver como residente, calculó el tiempo, metió sus manos en los bolsillos de la bata y fue a ver cuál era el meollo del asunto.

-¿Qué ocurre?- preguntó abriéndose paso entre la multitud. En la escena estaba el hombre ensangrentado de la camisa, queriendo golpear a uno de los enfermeros, reaccionó y le detuvo su muñeca antes del golpe.- le recomiendo que controle su carácter y déjese atender, los demás, pueden volver a los que están haciendo- le dijo al público y éste se empezó a esparcir a sus antiguas tareas.

-¿Quién eres y por qué me detuviste?

-Soy ______ y eso fue porque odio este tipo de escenas.- dijo mientras le atendía sus puños ensangrentados, el hombre hizo una mueca de dolor.

-Un gusto ______- le dedicó una sonrisa- me llamo Tae pero puedes llamarme V.

Ella le devolvió la sonrisa.

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Sonrió con melancolía mientras devolvía el boquitín a su lugar. Un ruido la sacó de sus pensamientos y dio un ligero salto al pensar que era Tae, volteó y sintió enternecida al encontrarse a los ojos a su hijo Jung.

-Mamá, tengo pesadillas- dijo su niño mientras se tallaba los ojos-¿Dormirías conmigo?

-Claro que sí, amor- sonrió ____, agarró a su hijo de la mano y se encaminaron escaleras arriba al cuarto de su hijo.

Ambos se recostaron y durmieron apenas tocaron la almohada. Esa era la única razón por la que ella seguía ahí.

Heridas que matan (Jin, Taehyung y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora