Charlie & Fernanda

Carta de Fernanda

Querido Charlie
Dije que no iba a llorar por ti, dije que no quería que fueras importante porque no lo eres.
Dije que no quería recordarte todos los días a todas horas.
No quiero seguir así, no quiero imaginarte a mi lado, no quiero seguir recordándote con tus rizos cortos y tu mirada sería detrás de tus anteojos, tus ojos tus ojos pequeños y hermosos, tus ojos que me hacen suspirar cada que te recuerdo.
Tu sonrisa que en pocas ocasiones tuve el placer de ver adornada con tus bellos hoyuelos que la hacen más especial.
Tú tan solo tú, con tu simpleza y tú hermoso lunar en el cuello, tú y tus formas de tu cuerpo, tus manos delgadas y masculinas.
Describiría cada cosa de ti, bueno solo lo que pude ver de lejos. Pero amaba verte aunque tú no me vieras, amaba mirarte aunque sea de lejos, aún que sea un segundo que pasabas junto a mi.
Amaba y odiaba como me ignorabas, que ni siquiera me dedicabas un segundo de tu vista, nunca fui lo suficiente a tus ojos para ti. Hubiera dado lo que me pidieras para estar a tu lado y para que tuvieras feliz. Por eso me aleje, por eso decidí irme, de no volver a verte y a olvidarme de ti.
Y a hoy aunque este lejos de ti, sigo llorando por ti, suspirando por ti y anhelando tu recuerdo.
Recuerdo como siempre me mirabas con superioridad, por qué yo no era como las demás chicas y nunca lo seré. Agradezco no serlo, pienso que algún día voy a encontrar a alguien que aprecie todas las fases de mi personalidad.
Tú no lo hacías, me daba cuando cuando me mirabas, como no era suficiente para ti, tal vez era por qué no te gustaba ni física ni personalmente.
Tal vez suene a despecho, tal vez lo sea pero estuve atraída hacia ti por más de un año, y nunca estuve cerca ni de decirte hola y dirigirte una pequeña sonrisa, verte me llenaba el alma en esos momentos, verte se significaba todo para mí, ir a la universidad solo para encontrarte y mirarte, mirarte todo lo que me fuera permitido, mirarte todo lo que pudiera para poder recordarte.
Rogar y querer encontrarte aunque sea un segundo para sentir un poco de amor.
Prometo ya no pensarte tanto, prometo olvidarte, pero sobre todo prometo dejar de quererte.
Atte. Fernanda
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Esta carta es de Fernanda hacia Charlie cuando recién se fue, tal vez escriba la de Charlie.