Capítulo 12

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Dos semanas después...

Tomo un sorbo de mi café y lo dejo sobre la mesa.

Ya que Ross tuvo que regresar a Los Ángeles por su trabajo no he tenido otra opción que hacer lo mismo, trabajar.

Me aseguró que le pediría el divorcio a Scarlett y un intercambio en la empresa para poder vivir acá definitivamente, pero temo que algo no resulte como debería.

Sé que ella sería capaz de crear algo contar de que él se quede con ella, incluso amenazarlo. Y no quiero eso.

Rasco mi cabeza frustrada.

-Hola hermosa- Susurra Jacob en mi oreja asustándome.

Pongo una mano en mi pecho y lo miro fulminante.

Sonríe picaron y se sienta frente a mi dejando sobre la mesa su café.

Trago saliva.

Estas dos últimas semanas no nos hemos dirigido la palabra, más bien soy yo a quien no le apetece hablarle ya que mi relación con Ross ha avanzado muy bien y no quiero estropearlo.

Sentir su risa cuando me mira he intento ignorarlo no era lo que buscaba, más bien quería que se diera cuenta de que no pienso continuar con lo que ambos habíamos empezado.

Tomo un sorbo de mi café antes de hablar.

-Jacob ya basta, no puedo engañar a mi novio.

-No pensabas igual hace unas semanas...-Presiono mis dientes- Admítelo, te mueres por qué te folle.

Plasmo mi mano en su mejilla en una bofetada.

Hace una mueca y soba su mejilla, lo fulmino molesta y me levanto de mi asiento dejando mi café en la mesa, se me fue el apetito.

Camino susurrando maldiciones.

Pensé que era diferente, pensé que era un caballero y por lo mismo era lo que más me gustaba de él, pero me equivoque. Soy una jodida tonta.

Suspiro profundamente, es una suerte que haya una cafetería dentro del mismo edificio donde trabajo, eso facilita las cosas.

Subo al piso cinco y entro en la oficina, Philips me sonríe amable, le devuelvo el gesto y me siento en la silla de mi escritorio.

-El informe a sido muy bueno...- Sonrío ampliamente agradecida- Deberías dedicarte a esto, he visto tu trabajo en los anteriores informes y han sido muy buenos, así que hable con Andrew sobre esto y le pedí que te ascendieran, si aceptas estarás con quince días de prueba, si todo resulta ir bien se te alargará en contrato y ganaras el doble de lo que ya ganas ¿Qué dices?

Trago saliva, inhalo una bocanada de aire y tomo un mechón de cabello dejándolo detrás de mi oreja.

Me halaga.

Desde hace dos meses estoy pensando en hablar con alguien para poder dedicarme a los informes como mi oficio pero nunca no hice.

Me alegra escuchar esta noticia después del mal rato que he pasado en mi desayuno.

Asiento entusiasmada.

-Por supuesto, ¿cuando empiezo?

Ya tengo planeado que usos le daré a mi salario además de los básicos.

Me mudaría a una casa, el departamento donde vivo es amplio pero aún así una casa se me hace más acogedor que vivir en el piso quince de un edificio en medio de la cuidad donde el ruido gracias al tráfico molesta hasta las tantas horas de la madrugada, y un sin fin de usos más le daría a ese dinero por saciar el apetito de las compras como siempre he querido.

-El lunes, deberás estar en el piso diez, tú oficina será la 08B para que puedas trabajar tranquila, me da gusto verte emocionada por un empleo que te mereces, felicidades... Pero _____, hay un problema, deberás viajar a Los Ángeles antes de que llegue el lunes si quieres obtener el empleo, la fecha de intercambio ya caducó y si quieres continuar acá deberás renovar tu contrato y confirmar que vives aquí oficialmente, es bastante simple, así no deberás a volver a Los Ángeles cada año por lo mismo, créeme, te conviene.

Trago saliva, resoplo.

Mi estómago se revuelve al recordar que Christian es uno de los encargados de los contratos, no quiero que él sea quien me atienda, aunque lo dudo, seguramente tiene cosas más importantes que hacer.

Sonrío a medias y asiento.

-No hay problema- Hablo sutil recordando que Ross estará en Los Ángeles aún para este fin de semana- Deberé viajar en dos días más si quiero ese empleo- Murmuro.

Asiente plasmando una mueca en su rostro.

-Valdrá la pena.

Sonrío a mis adentros. Estoy segura de ello, por lo mismo me esforzaría por ganarme ese lugar en esta empresa.

Con esto ayudaré a mis padres y los sacaré de esa miseria en la que viven.

Y quizás en un futuro cercano, le pediría a Ross que viviera conmigo si todo resulta ir bien.

Solo espero no cagarla de nuevo, no soportaría esconderle algo así otra vez.

Me siento fatal cuando recuerdo lo que he hecho, no lo volvería a repetir, sacaré mis esfuerzos a flote y Jacob no se interpondría más en mi relación, y Ross me ayudará con eso.

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Hagamos 25 votos! O 30! ❤️❤️❤️

Gracias @Melaani23 y @ RocioKassadraGomezG por ayudarme con el favor del capítulo anterior ❤️.

AÚN HAY TIEMPO PARA SEGUIR AYUDANDO.

PD: lamento no actualizar la novela pero literalmente todos los días de esta semana tendré exámenes así que no he tenido tiempo de escribir, actualizare lo antes posible, lo prometo.

Amantes II | Ross LynchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora