Capítulo 2.

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Estaba en mi habitacion haciendo un trabajo para la Universidad cuando escucho que Guillermo grita desde abajo borracho. Baje las escaleras y me lo encontre en la puerta con un chico. Un chico muy parecido a el, solo que con ojos azules y claramente, mas joven. -Rebeca- dijo- Este es mi preciado hijo. Apunto al muchacho sonriendome. -Quiero que lo atiendas bien, preparanos la cena y pon la mesa.

Acenti con la cabeza y fui hasta la cocina. "Un hijo, jamás lo había mencionado" pensé. Preparé una pasta que vi en un cajón y fui a servirles. Escuche que peleaban y me detuve, asome la oreja para escuchar mejor pero el chico se dio cuenta y fue hacia donde estaba.

-¿Se te perdio algo?- dijo.

-Esta lista la comida.

-No, no, no, no...Rebeca ¿Que no te enseñe yo a no escuchar tras las puertas?- Dijo Guillermo callendose de la mesa.

El chico fue a ver si seguia conciente, y por buena o mala suerte, no lo estaba. Levantamos a Guillermo entre los dos y lo llevamos a su habitacion. No sabía que decir o hacer, el muchacho tenía una expreción de rabia y tristesa en su cara.

-¿Necesitas algo?- pregunte con la cabeza abajo.

-No, solo dime donde puedo dormir.

Lo lleve a una habitacion donde antes dormia yo, la cama estaba sucia y los muebles con polvo. Salí de ahí dejandole unas mantas sobre la cama, fui hasta la cocina a guardar la cena y aproveche de comer un poco.

Subí, me acoste olvidando mis tareas y caí en un sueño profundo.

A la mañana siguiente desperte por unos ruidos en el sotano. Baje a ver que era y estaba Guillermo con el muchacho tirando cosas. -¿Que estas haciendo Guillermo? Estas cosas son de mi madre. - Mis ojos empezaron a arderme.

-Tenemos que vender cosas.- dijo- La casa no se paga sola.

-Pero esto no te pertenece!

No podia dejar que vendan las cosas de mi madre, no.

-Si, me pertenece... Todo esto, es mío.

-Guillermo, para.- el muchacho hablo.

Guillermo lo vio confundído.

-Rebeca sal de aquí.- Dijo.

Tome unas fotos antes de salir y fui hasta la cocina, mis ojos llenos de lagrimas explotaron. Esas cosas eran de mi madre, todo esto era de ella. No puede hacer esto.

Pasaron las horas, yo había limpiado la casa, había terminado mis tareas y había dejado la mesa lista para que coman. Me recoste en la cama olvidandome de todo un momento hasta que escuche que me llamaban.

No era la voz de Guillermo, era el muchacho. Baje pensando en que podia ser y el estaba sentado en la mesa. -¿Buscas algo?- Pregunte.

Me miro de pies a cabeza con desprecio y dijo.- Sientate a comer.

No pude evitar ponerme nerviosa y solte un "no tengo hambre".

-Sientate.- dijo serio.

Me acerque y me sente, había pure y pollo, pero yo no lo había hecho. El comía y yo apenas podia concentrarme en como se tomaba tomaba el tenedor y el cuchillo.

- ¿Rebeca verdad?- me miro- Soy Liam.

No dije nada, solo me meti un pedazo de pollo en la boca. El chico río.

Terminamos de comer y me ayudo a levantar los platos. Los lave y me fui a mi habitacion , pero en las escaleras el volvio a hablarme. -¿Podrias no dejarme hablando solo?.

Beca.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora