[NA: Una escena de la primera vez de Erwin y Levi en Pioneros fue la opción más elegida en la encuesta que hice hace unas semanas, así que aquí tenéis, y espero que séais indulgentes conmigo, hah. Recordad que este one-shot se sitúa justo después de la primera vez que Erwin y Levi se besan en Pioneros.
Advertencia: sexo explícito.]
***
Aquel primer beso llevó a más cosas de las que debería. Levi no había estado más nervioso y avergonzado en su vida, pero agradeció que Erwin tuviera ya experiencia. O lo pareciera, al menos.
Fue solo entre besos como se calentaron el uno al otro, y apenas contuvieron las manos por encima de la ropa hasta que Levi no se apartó oponiéndose a hacer nada en el despacho. Empujó a Erwin contra la puerta en cuanto llegaron a su habitación, cerrándola así, y alargó una mano para poner el pestillo casi a ciegas. Erwin aprovechó para desabrocharle la camisa, con dedos rápidos y la boca pegada a sus labios, devorándole sin pedir permiso para que su lengua invadiera la boca ajena. Levi no se quedó atrás y le sacó la camisa del pantalón, colando sus manos hasta sus nalgas y apretando. Erwin dio un pequeño respingo y él se sintió algo más seguro, porque su papel se basaba en fingir que sabía lo que hacía y que no estaba absolutamente perdido. Si se dejaba llevar por la timidez de la inexperiencia se haría ver débil de algún modo que ni siquiera era muy lógico, pero no podía permitir eso.
Levi tan solo se apartó un poco cuando le quitó la camisa a Erwin para admirar su torso musculado, que había visto de reojo justo aquel día cuando se lo encontró terminando de vestirse en el despacho. En ese momento había girado la cabeza para que no sospechase de él, pero ahora que podía verlo sin complejos le llegó a robar el aliento. Erwin sonrió.
—¿Te gusta lo que ves?
Su voz, más grave de lo normal, le dio escalofríos. Podía pensar lo que quisiera de su personalidad, pero físicamente, Erwin era perfecto. No sabía lo que había visto en él.
—Deja de ser un puto egocéntrico, rubiales.
Erwin ensanchó su sonrisa, enseñando los dientes, y volvió a pegarle a él. Levi le besó fervientemente mientras sus manos aprovechaban para explorar sus abdominales, su torso, sus hombros. Que su piel estuviera tan cálida solo le daba más ganas de no alejarse nunca. Apretando sus nalgas, Erwin le pegó más a su propio cuerpo, instándole a que se frotara contra él a pesar de la diferencia de altura que no dejaba que sus caderas se encontrasen. Levi acabó con la camisa desabrochada y sin pantalones cuando Erwin le empujó hacia abajo para que cayera de rodillas frente a los suyos desabrochados. El gran bulto bajo su ropa interior se veía con claridad y Levi la alcanzó para bajársela con prisas, destapando su miembro. Tragó saliva al instante. Un escalofrío bajó por su espalda, contribuyendo a su creciente excitación, y se relamió los labios sin poder evitarlo. Se habría olvidado por completo de que Erwin seguía mirándole si no fuera porque le tiró del pelo en aquel momento, levantándole la cabeza hasta que sus ojos se encontraron. El azul de los suyos era más oscuro que nunca.
—Te he imaginado así cada noche desde el juicio. El chico misterioso y rebelde que me molesta tanto arrodillándose voluntariamente ante mí.
No pudo contestar. Erwin le arrebató con solo dos frases todo lo que pudiera haber dicho en ese momento, y solo frunció el ceño con rebeldía sintiendo que aquel insoportable calor le subía del vientre al rostro. Debería haber sabido que Erwin sería de los que hablasen mientras él de los que se quedaban sin respuestas, incluso las bordes. Se reconfortó pensando que él era más de acción que de palabra, y consiguió salir de su vergüenza y sorpresa acercándose a la entrepierna ajena. La agarró con una mano y empezó a masturbarle sin avisar, provocando un sonido ahogado de parte de Erwin. Aquello le hizo sentir un poco más seguro y con control, y antes de lo que él mismo esperaba, ya estaba aproximando su boca lo suficiente para poder lamerle desde la base hasta la punta. Trabajó con su lengua por esa zona y sintió a Erwin temblar bajo la mano libre con la que se apoyaba en su muslo, y después un pequeño tirón en el pelo que le obligó a encontrarse otra vez con su penetrante mirada. Levi distinguió a través de todo el calor y los nervios cómo su excitación subía con una rapidez que nunca había experimentado, y cómo se sentía insignificante e importante a la vez estando de rodillas delante de aquel hombre que a veces odiaba y otras quería con una fuerza que le aterrorizaba de pies a cabeza. Erwin era quien le había sacado del abismo para lanzarle a otro.
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Incluso ellos (eruri collection)
Fiksi Penggemar«Todo el mundo es esclavo de algo. Incluso ellos.» Colección de one-shots y drabbles eruri, algunos desde el punto de vista de Levi y otros de Erwin. Capítulos, nº de palabras, advertencias de contenido y spoilers entre paréntesis + sinopsis: 1. Í...