✿ [ Flores. ] ✿

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Harry se encontraba fuera del aula de Louis, esperando a que este saliese.
Los demás chicos ya estaban disfrutando de el receso, mientras él estaba ahí, peinando el cabello de su linda muñeca.

¡Hasta que por fin! Louis salió.

Camino hasta Harry y se sento junto a él, abrazando sus pequeñas piernas.

"¿Hiciste algo malo, Lou?" Hablo Harry con sus pequeños ojos fijos en el contrario.

"Le pegue el chicle a Ele en su cabello." Se encogió en su lugar y observó de reojo al menor, este no le quitaba la vista. "Harry, no me mires así."

Y es que Harry no estaba consciente de que tenía sus ojos tan abiertos como dos platos.

"¡¿De verdad hiciste eso?!" Dejo la muñeca de lado y se coloco frente a Louis.

"Si, Hazz, lo hice." Suspiró y dejó soltar una pequeña risa al ver el rostro de la muñeca, este estaba hundido. "Dijo que eras feo, y de verdad no lo eres ¡Eres tan lindo, como tu muñeca!"

Al instante Harry se sonrojo.

"¿D-de verdad piensas eso?" Juega con sus pequeños dedos y esta vez, baja su mirada, evitando ver así el pequeño color rojizo en sus mejillas. "Gracias por defenderme."

Louis sonrió, pero lo que no esperaba era aquel beso en su mejilla, ¡Harry nunca había hecho antes eso!

El receso. [ L.S ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora