II

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(Narra Ryan)
Faltaban tan solo 10 minutos para que fueran las 7 y yo estaba que me moría de nervios, no sabía que era eso que Brend me quería decir pero le pedía a Dios que no fuera malo.

Aprovechando que el me diría algo, pensé que sería buena idea el comentarle algo también. Pero, ¿Por qué tan nervioso? Pues no era decir cualquier cosa, quería decirle a Brendon lo mucho que me atrae, que me tiene loco, que en lo único que puedo pensar en mis noches de inquietud es en él, que si no estuviera en mi vida yo básicamente no podría vivir.

Y también me gustaría pedirle ser mi novio, pero estoy muy inseguro de ello, ¿y si él dice que no? ¿Y si se burla de mis estúpidos sentimientos? ¿Y si me hace quedar como el gran idiota que soy? No quiero volver a la depresión por un chico, no otra vez, además  Brendon es el único chico que tengo en mi vida después de Spens, pero, los nervios me carcomían... El timbre interrumpió mis pensamientos, mis pensamientos que eran una tortura.

-Hola Ryro- dijo Brendon nervioso, aún que trató de ocultarlo, al igual que yo.
-Hola Brenny- respondí con entusiasmo y nerviosismo, él se sonrojó a causa de mi comentario. No pude hacer otra cosa más que observar su hermosa expresión de sonrojo.
-¿Nos vamos?-
-Claro

Fuimos a una cafetería cerca de mi casa, era un lugar muy lindo y tranquilo donde uno puede hablar muy a gusto según yo. De repente me encontraba mirando los labios de Brendon, esos jodidamente perfectos labios que me moría por besar.

¡Heeeeey Ryan Ross! ¿Estás aquí?
-Ahhh si si, perdón, estaba... Pensando- dije muy nervioso y sonrojado, la verdad es que a veces me sonrojo con facilidad.
-Jaja okay, ¿en que pensabas?- mencionó riendo Brendon.
-En nada importante- dije aún más nervioso.
-De seguro pensabas en tirarte a Dallon- dijo Bren con falsa indignación
-¡Claro que no! Si a caso pensaría en tirarte a ti
-¿Pero que demonios? ¿De dónde salió eso Ryan?- Brendon se sonrojó, últimamente lo hace muy seguido.
mNo lo sé, sabes que a veces no pienso lo que digo- me miró algo confundido pero con una mueca de gracia.

-Buenas tardes, bienvenidos al Coffe Soul, ¿están listos para ordenar?- dijo una señorita muy linda y amable.
-Si, yo quiero una tarta de zarzamora y un café americano por favor- respondió Brendon muy amable.
-Muy bien, ¿Y usted joven?-.
-A mi me gustaría un pastelito de chocolate y un frapuchino por favor
-¡Perfecto! En un momento les traigo su orden- dijo ella muy entusiasmada y se retiró.

-Bueno Brendon, que era eso, eso importante que me querías decir?- estaba nervioso pero feliz.
-Bueno yo... Tú y yo... Te parecerá extraño pero...- estaba tan nervioso que ni siquiera podía hablar.
-Calma Brenny, solo dilo- Dije tomando sus manos entre las mías, logré calmarlo.
-Bien, pues tú y yo llevamos muchos años de conocernos y bueno... ¿Cómo te lo digo? Yo, yo me... Mmm-e enamoré de ti- yo quedé estático a lo antes dicho por él. ¡Yo también le gustaba!
-¿Ryan? ¿Estás bien?- dijo preocupado.

-Si, estoy muy bien Brendon- le respondí extremadamente animado. Tenía que confesárselo también.
-Brendon, yo... Yo también estoy enamorado de ti, de hecho ¡planeaba decírtelo hoy!- Brendon se sorprendió.

-¿Qué? Entonces... ¿Tú y yo...?

Continuará...

Nos leemos luego! Besos! 😘

A Veces Decir Adios Es Lo Mejor  (RYDEN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora