Viejos Pensamientos

Un grito ahogado resuena a mitad de la noche,

voces, voces en la oscuridad antes de la luz,

cuando el viento se vuelve frío ni tu cruz puede salvarte,

en un cuadro rajado, han quedado las esperanzas,

de un viejo cuyo pesar ha pasado inadvertido,

detrás del cuadro una sombra se esconde, 

la mirada reposada en una muestra de andanzas,

entre la nieve con las danzas del huitlacoche,

de semillas infértiles que invocan lo ya advertido,

y hacen que las cenizas se claven al suelo como lanzas.

¿Me revelarás tus enseñanzas? ¿O correrás al olvido? 

Lastimosamente vienen los pensamientos del nevado

cielo bajo el que se refugian ideas de hace un siglo,

el bosque gris marchito y el terreno siempre árido,

lleno de zurcos por las vivencias ganadas entre sueños,

cuando éste hombre era joven y el mundo era viejo,

a sus ojos era todo conocido y al perderlos, se volvió extraño,

los huesos cansados y la piel marrón y la dureza del tejo.

Es un festejo la vida cuando el viejo se vuelve joven,

y cuando el joven se vuelve viejo,

sólo espera que por su alma las aves lloren.