Gnosis

Capítulo 2: Jefe final?

Sigue durmiendo, ¿porque no despierta? He caído sobre el revotando en la cama, ¿acaso no es este motivo suficiente para despertar?

Su cuerpo esta tibio, es una sensación agradable, es suave, toco su pelo, es de color negro rizado y piel clara. En el cuarto solo se encuentra una cama, un armario, un montón de cajas apiladas cuidadosamente, y una pequeña mesita con una PC portátil encima.

Han pasado 5 días desde aquello, y el chico aun no despierta. También Parece que aprendo según me es necesario, es la única explicación razonable al conocimiento que viene a mi mente.

Aún no he sentido sueño ni cansancio alguno en ningún momento, siquiera he necesitado comer, aunque esto es conveniente, ya que aquí no hay nada que pueda ser considerado comida, está todo descompuesto.

No soy capaz de salir fuera; las puertas no se abren, algo las bloquea desde fuera. Aunque algo me dice que no debería salir.

Entonces, al fin despierta, me siento algo feliz, se me escapa una sonrisa; se para sobre la cama y se impulsa hacia mi rápidamente, se aproxima a mis extremidades, me sujeta la muñeca izquierda girando mi brazo a la dirección opuesta, mientras se desliza a mi espalda.

Todo fue en un parpadeo, esto no me gusta, en ese momento mi cuerpo se sintió más ligero; salto como si la gravedad no existiera, girando sobre mi muñeca sostenida, logrando invertir el giro y soltándome, tras haber puesto mis dos piernas en su pecho, y dando una vuelta completa hacia atrás. cayendo parada sobre la mesita con la PC portátil.

Con la vos agitada le pregunto - ¿Porque me atacas?

- Permíteme responderte con otra pregunta, ¿qué harías si despertases y encontrases a una chica parada en frente de tu cama con una sonrisa, mientras sostienes un arma en la mano? ¿Acaso, mirándote mientras duermes?

- Una astuta respuesta. Ahora te entiendo

- ¿Quién eres y que haces en mi cuarto?

Caminé un poco, dirigiéndome hacia una de las cajas que había en el cuarto, sostuve un cuaderno y le dije:

-Tu deberías saberlo mejor que yo, tienes bastantes dibujos míos, demasiados, con cada pequeño detalle de mi cuerpo. ¿O me equivoco Éter?

Se sostuvo el mentón mientras miro un segundo hacia abajo.

-Esos dibujos son de alguien que solo he visto en mis sueños, aunque no puedo negar que son idénticas.

Tras escuchar esto le conté lo que paso, en sus ojos no noto ninguna duda, pero tampoco parece que me crea, aunque parece saber algo más.

-Una extraña historia. -Dijo mientras sonreía.

- Como supiste mi nombre?

- Te daré un consejo; si piensas mantener tu nombre en secreto, no firmes con él todo lo que hagas.

- ¿Se puede saber el tuyo?

-No poseo ninguno

tras unos segundos de silencio.

-Ya sé, te llamaras Yami.

- ¿Porque Yami?

-Al moverte antes, fue como si fueses una sombra en la oscuridad, de ahí el nombre Yami (oscuridad). Además, esa aura oscura perfectamente visible que rodea tu cuerpo, no es normal

La forma calmada en la que hace esta afirmación, como si fuese algo normal para él, y siendo algo nuevo e impresionante incluso para mí, es sospechosa.