Apology

Siempre esperaste por mi

Vengo con un fic de iKON, tengo unos cuantos capítulos ya escritos así que espero que ir rápido con las actualizaciones. Los títulos de los capítulos van a ser partes de la letra de su canción Apology.

En concreto esta es  항상 날 기다렸지만   , que significa siempre esperaste por mi Espero que os guste!! <3

PD: me he saltado un poco las edades de Bobby y B.I, ahora Bobby le saca 5 años porque sí xD

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Jiwon caminaba bajo la lluvia sin importarle mucho mojarse. Otro trabajo perdido, más gritos y lloros que acabarían con él saliendo de su casa para volver unos días después. Su cabeza intentaba encontrar el fallo que había cometido aquella vez. Aquella mañana había entrado a la tienda como cada día se había colocado la camiseta de trabajo. Su jefa le saludó amablemente y él mostró unos hoyuelos a modo de respuesta. Atendió amablemente tras el mostrador, ayudando a quien se le acercaba a pedir las frutas y verduras que se mostraban a su espalda.

—Jiwon, ven un segundo—le había dicho el hijo de la dueña abriendo la puerta del almacén. Esperó a que el nombrado llegará a su lado y cruzó los brazos mirando al suelo—. Por circunstancias ajenas a nosotros vamos a tener que prescindir de tus servicios, lo siento mucho.

Jiwon agarró con fuerza la botella de soju que llevaba en la mano y la lanzó contra la pared más cercana con rabia recordando el momento. No había nadie en la calle así que no se preocupó por los pedazos de cristal que saltaron. Se tocó la cara notando algo caliente en su mejilla y sus dedos se tiñeron de rojo. Uno de los cristales había rebotando dándole un pequeño corte en el lado derecho pero lo ignoró. Entones se acordó de que el hijo de su jefa llevaba una venda en el brazo e instintivamente la cara de su hermano apareció en su cabeza y maldijo por lo bajo.

—Voy a matarlo, si ha hecho algo juro que lo mato—gruñó acelerando el paso, casi corriendo hacia los edificios grisáceos en la distancia.

Subió las escaleras de dos en dos y golpeó con fuerza la puerta que tantas veces había visto, al fin y al cabo era su casa. La puerta se abrió y tras ella apareció una señora pequeña que sonrió al ver a Jiwon.

—¿Te has vuelto a dejar las llaves cielo?—preguntó la mujer mirando a Jiwon con dulzura. Este dio un par de zancadas adentrándose en el espacio.

—¿Está aquí? ¿O ha ido a drogarse con su novia?—preguntó abriendo la primera puerta con furia.

—¿Qué ha pasado hijo?—su madre se acercó y le agarró del brazo frenándole.

—Me han despedido mamá, y estoy convencido de que es culpa de tu hijo.

Jiwon abrió la segunda puerta de un empujón, tampoco estaba allí. Su madre se colgó a un más de su brazo casi con lágrimas en los ojos.

—Cielo también tu hermano—sollozó ella pensando en sus hijos que tantos disgustos le habían dado, aunque fuera en gran parte culpa suya.

—Que compartamos la mitad de la sangre no me obliga a ser amable con él si es un gilipollas—la tercera y última puerta se abrió mostrando aun chico tumbado en una cama envuelto en una nube de humo. Jiwon se tiró sobre él agarrándole del cuello y obligándole a levantarse para estrellarlo contra la pared.

—Mierda Hanbin, ¿He perdido mi trabajo por tu culpa?—le preguntó Jiwon con la mirada encendida de ira. El susodicho rió probablemente bajo los efectos de la hierba.