Abri los ojos, un sonido relajante pero fuerte me saco de mi sueño, era el despertador que mi abuelo programo en mi celular dice que si me despierto con un sonido fuerte y molesto estare de mal humor todo el dia. Me puse mi uniforme, blusa blanca holgada con con una corbata, y una falda cuatro dedos arriba de la rodilla color negro, y unos zapatos cerrados simples sin broche. Mi mochila es de azul turqueza simple, con dos bolsas una bolsa enfrente y otra normal, un espacio para el agua el la derecha y otra bolsa en la izquierda. Baje para desayunar, mi abuelo estaba desayunando algo asi como una sopa con leche.
-¿Que es eso abuelo?
-Es cereal, toma un tazon, ponle cereal, luego leche y lo comes con una cuchara.- Dijo señalando las cosas que estaba describiendo. Hice todo lo que me indico y me lo comí, que digo comí, TRAGUE. Despues de que "trague" mi comida mi abuelo arranco el auto y fuimos a la escuela, me dejo en la entrada.
-Portate bien y recuerda que si ahy una emergencia tienes que llamarme, ¿ok?.- dijo con cara de hablo encerio.
-ok.- agregue con carita de angel y me dirigi a la escuela, y fui a la direccion por que mi abuela dijo que ahy me asignarian un casillero salon y alguien que me mostrara la escuela. Me sente en una de las sillas que estaban afuera, un rato despues Coral (la chica morena de el otro dia) salio de la direccion, y cuando se percato de mi presensia volteo y me sonrio.
-¡¡Hola!! ¿como estas?.- me dijo muy amigable.
-Bien gracias, ¿que hacias en la direccion?
-La directora me llamo, queria que le mostrara la escuela a la chica nueva que esta sentada afuera- dijo inclinandose hacia mi.-Bienvenida a la escuela, tenemos que empezar en la entrada. Caminamos y caminamos, yo estaba poniendo atencion en todo, desde donde estaba la entrada hasta como se llagaba al techo. Ella me dijo que es la hija del arquitecto que diseño el edificio y por eso la llamo la directora, solo ella sabe como llegar a cualquier lugar. Subimos al techo por un camino complicado con muchas puertas es facil perderse ahi de repente. Tuve suerte de aprendermelo.
-Me encanta este lugar, es lo mejor sobre todo cuando nadie sabe que estoy aqui, no le digas a nadie de este lugar.- solto de repente, me lanzo una mirada de advertencia cuando dijo las ultimas 8 palabras.
-Claro que no, es un secreto.- dije desidida.
-Claro que si gracias, cierto se me olvido vamos a tu casillero.- volvimos casi corriendo por la escuela hasta que llegamos a un lado de el salon de arte.
-Este- dijo señalando el casillero que me queda en frente.-es tu casillero, y terminamos el recorrido -saco una una hoja de su mochila y me la dio- este es tu horario. Terminamos el recorrido y debo irme, que tengas buen dia.-se fue sin dejar que le dijera algo.
La primera clase comenzaba en unos minutos y era de Historia, trataria de poner la mayor atencion que pudiera, para aprender mejor sobre lo de aqui, sono el timbre y me diriji al salon de historia, entre buscando un lugar y cuando vi uno vacio en la primera fila me dirigi a ese y deje mis cosas ahi me acomode de modo que mis brazos estubieran alrededor de mi cara y mi pelo la cubriera, lo llevaba suelto.
-Oye ese es mi lugar.- escuche decir a un chico, pero esa voz se me hizo bastante familiar, levante mi cara para verlo, parecio impresionado.- ¿Diana?- Dijo el una vez me vio.
-Si, hola Adrian, lo siento no sabia que era tu aciento.- Dije incredula levantandome del aciento pero me detuvo. No pude creer que estuviera ahi ese hermoso chico con cabello oro.
-No, eh esta bien, ire a buscar otro.- dijo sonriendome y se fue a atras, mientras me volvia a sentar. Voltee a donde habia ido y lo descubri mirandome como lo hizo el otro dia en el centro comercial, cuando se dio cuenta de que lo estaba viendo volvio la cabeza rapido. un rato despues llego el maestro...