Virus Letal II: La Cuarentena

Capítulo 7: "El consejo se reúne"

Al día siguiente desperté con la cabeza dándome vueltas. Ese sin lugar a duda, había sido mi cumpleaños más caótico hasta el momento. Ahora tenía que prepararme para la junta antes de la expedición hacia el viejo parque de diversiones. Curiosamente nunca había ido a tal lugar, ya se: ¿En tu ciudad hay un gran parque de diversiones con rueda de la fortuna y montaña rusa, y nunca has ido? Me preguntó lo mismo.

"Alístate" había dicho Ion, aunque no sabía cómo alistarme exactamente. Una misión nunca era muy...exacta. Podía pasar todo lo contrario a lo que tu planeaste. Las misiones nunca eran exactas, todo podía salir al revés de lo planeado. No me gustaban, me había prometido a mí mismo que nunca volvería a una. Claro que no era muy diferente a los días de recolección.

"Será sencillo" me repetí a mi mismo.

Salí de mi habitación y fui directo a la Sala de Reuniones, todos ya estaban ahí.

— Tarde—gruño Rick.

— No te preocupes—se apresuró Ion—. Acércate, Michael, comenzábamos a hablar sobre la misión. Jessica, de acuerdo con las Leyes y Normas del Colegio, promulgadas por mí el pasado febrero; como dicta el artículo 114°....

— ¿Sientes cuantos? —exclamó Bernard.

Casi todos en la reunión reímos. Cari puso los ojos en blanco y de inmediato me sentí culpable.

—... ubicado en la sección cuatro: "Expediciones"—continuo Ion—. Tienes derecho a elegir a cinco acompañantes, los que desees. ¿A quién llevarás?

— Pido a Michael—soltó Jessica, como si lo hubiese estado planeando desde hacía mucho tiempo.

—Michael, ¿aceptas? —preguntó Ion guiñando un ojo.

—Si—dije.

—Bien, ¿a quién más? —preguntó Ion.

Pude notar que Cari se molestó con mi decisión.

"Que no sea Paul, por favor" pensé. Mientras menos personas que me importaran quedaran expuestos, mejor.

—Quiero a Jack y a Paul—continuó.

Mierda.

—Te recuerdo que Jack por su alto rango, no puede ir— añadió Ion—. Estará ocupado dirigiendo, coordinando las misiones hacia los paracaídas, la seguridad y esas cosas. ¿Paul?

El chico me miró, como esperando mi aprobación. Hice todo lo posible por transmitirle mi mensaje: "¡Ni se te ocurra!"

—Yo voy—dijo.

— También quiero a....Cari—dijo.

—No—se apresuró Cari enfadada—. Lo siento, yo no vuelvo a ese infierno.

Al menos alguien de nosotros tenía cerebro.

— Entonces, nada más.

— ¿Segura? —preguntó Bob.

—Sí.

— ¿Solo ustedes tres? —preguntó Jack—. ¿Tu sola con ellos dos?

—Sí, ¿o por ser mujer no puedo defenderme? ¿Qué necesito más ayuda? —preguntó Jessica con una sonrisa.

— Bueno, me convenciste —dijo Cari—. No podrás cargar sola con estos dos.

Mierda mil.

— ¡Eso! ¡Girl—power! —festejó Jessica.

— Está bien, irán los cuatro—dijo Ion—. Segundo, le proporcionaremos armamento y suministros para el camino. Como es solo una misión de Exploración, no podrán llevarse la camioneta, les daremos un auto.

— Bien, ¿Quieren el Maceratti o el Ferrari?

— ¿Tenemos esos? —preguntó Paul sorprendido.

—No, solo bromeaba—río Ion—. ¿Qué tenemos?

— Poseemos un Yetta y un Ford —apuntó Bob.

— Llévense el Yetta, Bob cárgalo de Gasolina.

Bob asintió.

—Bien, les recuerdo chicos que esta es una zona inexplorada de la ciudad, nadie del Colegio ha ido hacia allá antes. Tengan mucho cuidado, ¿sí? Lo mejor será que partan el jueves por la mañana.

—Mañana es jueves—apunté.

—Mientras antes se vayan, antes estarán de regreso. Deben ir al parque, explorarlo. Encontrar la fuente de recursos que Mathew mencionó, si pueden asegurarlo. Luego regresan y darán su información a los recolectores. Algo simple.

—Está bien.

—Si todo sale bien, llegaran el mismo jueves por la tarde.

— ¿Y si sale mal? —pregunté.

—Entonces, no llegaran—dijo Ion tranquilamente, como si morir devorado por zombies fuera tan encantador—. Listo, ¿Alguna duda?

—No—respondí.

—Bien, la sesión está terminada. Buena suerte, chicos.