el invierno siempre se convierte en primavera ➳ larry stylinson

capítulo 5.

Hoy fue el día más cargado que pudo tener en el hospital pero gracias a Dios sus vacaciones empezaban el Lunes sólo tendría que ir hasta el Domingo a la tarde.

Zayn lo había llamado y le dijo que podrían juntarse algún día ya que hace mucho no pasan tiempo juntos. Lo consideraría. Podría hablarle a Zayn sobre Harry, no podía dejar de pensar en él. Aunque quizás no sea tan buena idea hablar con Zayn porque el se toma todo con calma y ¡Él estaba pensando en otro hombre cuando su mujer estaba preocupándose por él!

Se dio cuenta de que había pasado de largo cuando llegó a su casa y ahora se encontraba frente al edificio donde vive Harry ¡Demonios!

– ¿Uhm Louis? –escucho la voz del chico detrás de él.

–Oh, mm, hola. Sólo venía a traerte el saco –soltó Louis buscando alguna excusa que no lo haga quedar como un idiota pero sí quedó como un idiota. No traía el saco con el, maldición– Bueno al menos eso pensé ¡Debo ir a buscarlo! Uhmm ¡Prometo traerlo! ¡Adiós! –dijo a punto de echarse a correr pero Harry lo tomo de una muñeca y lo hizo girarse sobre sí mismo.

Quedaron frente a frente y de repente comenzaron a reír.

Estaban demasiado cerca pero en vez de besarse normalmente se dieron un beso esquimal.

–Vamos adentro –rio Harry y Louis asintio con la cabeza.

Entraron al ascensor  y Harry no se contuvo más.

Se abalanzó sobre Louis y comenzó a besarlo salvajemente. Louis tardó un poco más pero lo hizo.

–Prometo que eso no volverá a pasar  –dijo Harry a punto de estallar de risa por la cara roja de Louis.

–Espero que vuelva a pasar –susurro Louis pero Harry lo oyó.

–¿Qué? –pregunto Harry queriendo oír eso salir de los labios del ojiazul de nuevo.

–Uhm nada, nada –se apresuró a decir Louis.

Llegaron a la puerta y Harry la abrió dejando pasar a Louis primero.

La cerró detrás de ellos y no le dio tiempo a Louis de sacarse la bufanda que lo elevó en el aire y al instante Louis tenía sus piernas enredadas en la cintura del más alto.

–Lou no sabes cuando te deseo ahora mismo –dijo Harry sobre los labios del ojiazul lo que hizo que Louis soltara un gemido.

Harry camino hasta su habitación con Louis en brazos y lo recosto sobre la pequeña cama de una plaza y media. Comenzó a besar su cuello lentamente y claviculas dejando unos grandes marcas moradas y rojas que serían difíciles de tapar.

Poco a poco se fueron desprendiendo de sus prendas hasta quedar completamente desnudos y ambos tenían grandes erecciones.

–Esto es lo que provocas en mí –dijo Harry haciendo una pausa– Además cada vez que te veo mi corazón para y vuelve a latír más acelerado de lo normal –soltó sin más ¿Aquello era una confesión de amor? Sí, definitivamente.

–A mí me pasa igual... –decía Louis casi inaudible y excitado.

–Déjame hacerte mío hoy –dijo besando el lóbulo de la oreja del.ojiazul.

Louis asintio y sentía como el chico de rizos iba comenzando lentamente a penetrarlo.