el invierno siempre se convierte en primavera ➳ larry stylinson

capítulo 12.

Habían pasado ya tres años. Tres años increíbles. El rompimiento con Ally había sido duro y Louis la cagó cuando dijo la frase más cliché y la que nunca puedes decirle a una mujer "No eres tú, soy yo, pero de todas formas podemos seguir siendo amigos" Y eso había sido suficiente para que Ally reviente una docena de vasos contra el piso, de todas formas eso ya no importaba.

Después de un largo tiempo buscando el lugar perfecto en donde vivir finalmente lo encontraron.

Caminaron por el camino de piedra de la casa color rosa pastel y abrieron lentamente la puerta.

El camión de mudanzas aún no llegaba.

Louis traía a una pequeña niña con cabellos color oro de apenas dos años. La pequeñita vestía unas zapatillas rosas, una jardinera de jean con una remera rosa debajo y su cabello estaba recogido en dos coletas. Lizzy.

Harry, en cambio, en brazos traía al bebé más hermoso del mundo, según la madre de Harry. Su nombre era Cole.

Louis suspiro feliz cuando entró completamente a la casa.

Bajo a Lizzy dejándola en el suelo y la pequeña comenzó a recorrer el lugar que era algo distinto al departamento de Harry pero finalmente sonrió.

– Hogar, dulce hogar –habló Harry acunando a Cole en sus brazos y mirándolo con amor.

Louis sonrió.

Se acercó a Harry y le dio un casto beso en los labios.

Louis comenzó a bajar algunas cajas que traían en el auto y comenzó a ordenar y limpiar el lugar mientras Harry dejaba a Cole en el moisés. Lizzy se dedicaba a elegir cuál sería su habitación.

Con ayuda de Harry comenzó a ordenar los marcos con fotos sobre la chimenea.

Todo tipo de fotos adornaban el lugar.

Los padres de Harry.

Del hermano de Louis.

Fotos de Louis y Zayn.

De los niños.

Zayn con los niños.

Ellos dos juntos, algunas besándose otras sonriendo.

Fotos de Harry y sus amigos.

Fotos de Louis.

Fotos de Harry.

Fotos de ellos juntos con una familia feliz.

Harry logró que Louis volviera a hablar con sus padres, la relación no es muy cercana pero "algo es algo" decía el ojiverde.

– Te amo –dijo entre risas Louis mientras Harry le hacía cosquillas.

– Dilo más fuerte –rió Harry.

– ¡Te amo! –la pequeña Lizzy apareció y se abalanzó sobre ellos.

Soltaron una carcajada y ambos besaron a Lizzy al mismo tiempo lo que hizo que se convirtieran en un sandwich.

Louis agarró su celular y tomó una foto del momento.

Rieron cuando Lizzy refunfuño mientras se pasaba las manos por sus mejillas, limpiándolas, húmedas gracias a los besos de sus padres.

Llegó el camión de mudanzas y por fin pudieron terminar de ordenar toda su casa.

La casa era una mezcla de blanco y negro los pisos eran y había muchas plantas y flores.

– Estoy muy cansado –habló Louis bostezando.

Se encontraban en el sofá. Louis acurrucadó en el pecho del ojiverde.
Harry beso la cabeza de Louis y masajeo sus brazos.

– Hmmm –Harry sintio la respiración de Louis en su cuello.

– Los niños duermen –susurro Harry.

– Uhm –Louis deposito un beso húmedo en el cuello de Harry.

Subieron las escaleras hasta llegar a su habitación y cerraron la puerta con pestillo.

Comenzaron a besarse lentamente y luego tropezaron y cayeron sobre la cama. Rieron.

Se desnudaron poco a poco, disfrutando el momento.

Harry dejó varias marcas rojas en el cuello de Louis.

El miembro de Harry latía fuerte, bajo de sus boxers, al igual que el de Louis.

Se liberaron y Harry comenzó a penetrar a Louis.

Louis gemía debajo de Harry.

– Te amo –habló Harry con voz ronca y luego beso embelesado a Louis.

Louis abrazó el cuello del ojiverde y recargó su rostro sobre su hombro.

El ojiazul se vino en el abdomen de Harry y fue seguido por el rizado.

Louis miró a Harry que aún seguía sobre él, intentando recuperarse y le sonrió. Harry le devolvió la sonrisa y le estampó un beso en los labios.

– Tienes un efecto en mí, aún no logró descubrirlo pero me vuelve loco –habló sincero Harry, Louis soltó una risita y le dio un pico a Harry en los labios.