Me Enamoré De Una Mormona

I. ¿Otra adicción?

Empecé mi día con el pie derecho pues, lo primero que ví al levantarme fue mi teléfono y en el se encontraba un mensaje de Shayneth...

-Gracias por los lentes, me encantan, solo tú puedes ser el que los puso en mi bolsa ''Buenos días Bello Durmiente''-

Le respondí pero fue en vano ella no estaba conectada no le llegaban los mensajes. Luego que tomé una ducha y me vestí, me tiré nuevamente en mi cama pensando en Shayneth pero....

**Llamada telefónica**
-¡Hey! Yonahel iremos hoy a la casa de Zharick, nos invitó a tomar unas cervezas.

-Sí era Carlos llamandome y... ¿para qué? Es obvio otra fiesta. Ya había salido ayer y... bueno digamos que esa no cuenta pues no bebí ni nada por el estilo pero, siempre que voy a una fiesta con Carlos termino perdiendo la conciencia de hasta quien soy y eso a mi me preocupaba y... ¿se pueden imaginar la preocupación de mi madre? - No lo sé Carlos, yo salí ayer y mi mamá no me permitirá salir nuevamente.- inventé una excusa barata.

-Pero si ella no se enterara Wey, si haremos una ''tarde de estudio'' y entonces haremos una pijamadas de chicos, eso sonó muy homosexual ¿no lo crees?

-Tú y tus ocurrencias- reí ante su patética y no creíble mentira.

-Vamos hombre, ¿te vas a ser el del rogar?

-Vale, esta bien... solo por esta vez, porque estoy aburrido. - no se porque de una u otra manera él siempre suele convencerme.

-okay mira entonces paso por tí a las 3:30 pm. ¿está bien?

-Sí perfecto, estaré listo a esa hora.

**Fin de la llamada telefónica**

Bajé las escaleras algo nervioso yo no le puedo mentir a mi mamá, aunque la verdad pensándolo bien no es una mentira pues Carlos y yo debemos hacer una investigación sobre animales en peligro de extinción.

--Estuve tan distraído pensando en que le diría a mi mamá que no me percate que estaba frente a mi- Buenos días mi amor.

-Hola mamá tengo que decirte algo- quizás si le digo de una vez y sin rodeos ella no sospechara que es una mentira.

-Dime mi rey-

Ella estaba buscando en la nevera algo la verdad no sé que buscaba, me imagino que algo para cocinar de desayuno. Iba a decirle de una vez pero ella me interrumpió.

-Espera cariño, antes de que me digas lo que querías decirme, necesito que cuides a las gemelas hoy-

Ahora si me jodió la salida- Mamá pero si te iba a decir que hoy iba a salir con mis amigos-

-pues reúnanse aquí, no volveré hasta mañana en la noche. Quise llamar a alguien que me las cuidara pero hoy no podía, así que mañana llegará así que mañana podrás salir a donde desees.

Mi mamá sabía como arruinarme las salidas -Pero si mañana tengo que matricularme en el nuevo semestre, eso no es justo-

-Te digo que no es justo Yonahel, que yo te apoye a ti en todo y que te cubra de tu padre para que no te pegue y regañe y tú no puedas hacer algo por mí... Ya te dí autorización para que hagan Aquí su reunión de amigos pero no tomes, pues tienes que vigilar a las gemelas.

No le respondí nada solo me senté en el taburete del pasador de la cocina.

-Te estoy hablando Yonahel.