No planeaba amarte! (EUNHAE)

Capitulo 6

Caliente, mucho, demasiado caliente. Y ahora ardiendo, estaba sudando, internamente y externamente. Gritó, golpeando la puerta. El aire, ya demandaba en este punto, escapando de sus pulmones. No podía respirar. Gritó pidiendo ayuda, llorando y jadeando por aire. Se deslizó por la pared, agotado. Cerró los ojos con fuerza. Su pecho, lanzó un grito desesperado por aire. Y finalmente, dejó que la oscuridad lo consumiera...

Los ojos de Donghae se abrieron instantáneamente y su cuerpo saltó hasta una posición sentada. Presionó firmemente su mano contra su pecho, que se endurecía de la manera mas dolorosa. Sus ojos observaron a su alrededor en velocidad rápida, escaneando su entorno. Tomó un profundo suspiro de alivio. Estaba en su dormitorio.

Apoyó su espalda en la cabecera de la cama, ya que podía sentir el sudor frío fluir por su rostro. Sus manos temblaban. Era el mismo sueño otra vez. No sabía cual era su significado. Últimamente, después de la cirugía, siempre perturbaba su sueño, pero no se lo había contado a sus padres. No podía, ya que sabía que eso solo haría su oportunidad de poder ir a la escuela disminuyera aún mas. 

Pasó las piernas por el costado de la cama, y se levantó. Abrió la puerta y salió de la habitación. La casa parecía tan vacía en ese momento. Bajó las escaleras y entró en la cocina antes de buscar el agua fría en la nevera. Sin molestarse en encontrar un vaso, sostuvo la botella hacia arriba y dejó caer lentamente el agua fría en u boca. Estaba a punto de poner la botella vacía en su lugar cuando una voz familiar lo saluda.

"Donghae-ssi"

- Se dio la vuelta y descubrió que el hombre de traje negro estaba de pié en la esquina de la cocina. 

"Gu-guardaespaldas Jung, ¿qué está haciendo aquí  a estas horas?" - preguntó, tratando de esconder su sorpresa con la repentina presencia del guardaespaldas.

"Son las cuatro de la mañana, Donghae-ssi. Voy a acompañar al Sr. Presidente a Busan esta mañana. Estoy aquí para hacer la preparación." - explicó el guardaespaldas en voz tranquila con detalle. Donghae tragó saliva. 

"O-ok, solo.. haz tu trabajo tranquilo. Regresaré a mi habitación." - no pudo ocultar su tartamudeo. Puso la botella en su lugar antes de cerrar la puerta del refrigerador. Estaba a punto de salir de la cocina, pero el guardaespaldas habló.

"¿Tienes hambre Donghae-ssi?" 

- Alzó la mirada hacia el hombre que no tenía ninguna expresión escrita en su rostro. 

"No..," - pero al mismo tiempo, su estómago lo traicionó. Gruñó en voz alta. Por supuesto que su estómago pedía a gritos ser llenado si no comió nada desde ayer. El guardaespaldas arqueó las cejas. 

"Puedo preparar algo para ti si quieres."

"¿Eso estaría bien? Mi padre se enfadará si sabe que cocinó para mi."

- El guardaespaldas caminó hacia la nevera. Tragó saliva cuando el hombre se le acercó. "Guárdalo como un secreto. Nadie lo sabrá." - dijo casualmente y se inclinó para tomar dos cajas de espaguetis congelados en la nevera.

"Puedes sentarte allí, los prepararé en diez minutos."

"Si.." - Donghae asintió. Se movió lentamente para sentarse en el taburete de la mesa de la cocina y miró fijamente al guardaespaldas que estaba ocupado colocando los espaguetis en el microondas.

"Si quieres crecer para ser un chico fuerte, no debes saltarte la comida."

"Huh?" 

"Especialmente después de la cirugía, si quieres demostrarle a tu padre que eres un adolescente maduro para poder permitirte ser libre."