No planeaba amarte! (EUNHAE)

Capitulo 54

3 años después.

Habían pasado tres años desde que Hyukjae se mudó a los Estados Unidos con su madre y no había ninguna señal de que regresara pronto. Peor aún, su padre seguía a cargo y había ganado las elecciones de nuevo con el voto de la mayoría. Donghae se sintió traicionado, sintió que su padre no cumplió su promesa. Prometió renunciar en 2 años, pero había ocurrida algo más. Sigue siendo el hijo del Presidente y tiene que tener un guardaespaldas en todo momento. Odiaba ser controlado y la mayoría del tiempo, hacía lo posible por deshacerse de ellos.

- Donghae estaba actualmente encerrado en su habitación, preparándose para una fiesta mientras pensaba en una forma de escapar de sus guardaespaldas. Se vistió y se puso los zapatos antes de partir. Se tomó su tiempo bajando por los escalones como pudo oír a su madre charlando con el personal. Rodó los ojos antes de ponerse las gafas de sol sobre la cara.

Giró el pomo con suavidad y salió antes de que alguien notara su escape. Curvó sus labios en una sonrisa mientras cerraba la puerta detrás de el. Dejando escapar un pequeño suspiro y mordiéndose el labio antes de voltear y dirigirse hacia el porche y hacia el garaje, donde estaba su coche estacionado. Subió al asiento del conductor y cerró la puerta.

"¡Donghae-ssi!"

"Oh, mierda!" - murmuró mientras observaba a los dos hombres de traje negro que caminaban hacia su coche. Rápidamente bloqueó el coche y puso la llave encendiendo el motor. 

"Donghae-ssi, abre la puerta." - dijo uno de los guardaespaldas mientras golpeaba la ventana. Donghae sonrió y apretó con fuerza el pie en el acelerador. El coche avanzó rápidamente, ganando velocidad y forzó al otro guardaespaldas a saltar hacia un lado antes de ser atropellado. Salió de la mansión mientras miraba por el espejo retrovisor. Sus guardaespaldas, estaban en un caos tratando de perseguirlo. Se echó a reír y sacó su teléfono para llamar a alguien.

"Minho, espérame en el lugar habitual. Estaré allí dentro de quince minutos."

- Dejó el coche a un lado de la carretera cuando no vio ningún carro familiar detrás de él. Rápidamente, saltó de su coche y corrió hacia la parada del autobús, al mismo tiempo que  un autobús se detuvo. Se subió mientras se ponía la máscara. Suspiró aliviado. Estaba solo, sin guardaespaldas. Nadie lo notó y se sintió libre. Podía disfrutar de la fiesta toda la noche. Sonrió detrás de su máscara. Se sentía feliz.

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Donghae se despertó ante el molesto sonido de su teléfono que zumbaba sobre la mesa. Gimió, hundiéndose aun más en su almohada. Esperando que quien quiera que sea que lo llamara tan temprano por la mañana, se rindiera. Por desgracia, eso no pasó. Con los ojos aún cerrados por la fatiga, alargó la mano ciegamente y buscó su teléfono.

"¿Hola?" - gruñó y estaba apunto de volverse a dormir.

"Buen día, pez."

- Abrió los ojos instantáneamente en alerta. "¿Hyukjae?"

"Si, soy yo. ¿Dónde estuviste anoche? No pude contactarte." - la voz plana preguntó.

- El moreno se aclaró la garganta. 

"¿Una fiesta?" - respondió como una pregunta. "Si.. la fiesta de cumpleaños de Minho." - mintió.

"No importa de quien es la fiesta. Al menos deja de hacer que tus padres se preocupen por ti."

"Si lo se." 

"Tengo que ir. Hablaremos después."

"Hyukjae, espera!"

"Mmm"

- Donghae respiró hondo. "¿Qué somos ahora?"

"No tengo respuesta."

"Vamos Hyukjae, tu sabes la respuesta. ¡Estoy sufriendo con todo ésto!" 

"Lo siento. Tengo que ir, Lee Donghae."

- Oyó un click. Había colgado. Donghae cerró fuertemente los ojos mientras apretaba los dientes.

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"Donghae-ssi, tu padre te está esperando en el estudio."

- Miró al asistente de su padre. Asintió, sonriendo antes de entrar en la habitación. Su padre estaba sentado en el sofá de cuero mientras leía algunos documentos. Una vez que se dio cuenta de la presencia de su hijo, rápidamente dejó a un lado la pila de papeles.

"Hey amigo, estás aquí." - el Presidente sonrió. Donghae se encogió de hombros mientras se sentaba en el sofá opuesto. "¿Qué pasa con esa cara larga? ¿Peleaste con alguien?"

"No, estoy cansado." - contestó.

- El hombre rió entre dientes. "¿Qué pasa?"

Donghae suspiró. "Estoy cansado de estar rodeado de guardaespaldas. No puedo creer que hayas ganado las elecciones de nuevo. En serio papá, necesito una vida normal."

"Casi atropellas a nuestro guardaespaldas. No deberías haber hecho eso." - su padre respondió en un tono tranquilo mientras miraba a su hijo menor. Donghae hizo una mueca.

"Odio cuanto intentan detenerme de hacer algo."

"Solo quieren protegerte."

"Papá, por favor. No los necesito. Solo necesito mi vida normal. ¿Podrías descender? Y vivir feliz con nosotros." - preguntó.

"Dame un año y voy a descender. Lo prometo."

- Gruñó. "No hagas promesas que no vas a cumplir, papá."

"Por ahora, contraté un nuevo guardaespaldas para ti. Te gustará."

"No me gustan mis guardaespaldas." 

"Estará aquí la próxima semana. Asistirá a la misma Universidad que tú."

"¿Qué? ¡Yah, papá! En serio, necesito privacidad. No puede ir a la Uni conmigo. No necesito un guardaespaldas en mi campus. Estoy a salvo, papá."

"Lo necesitas."

"¡Que no!" - insistió.

- El Presidente rió entre dientes. "Creo que deberías disculparte con el anterior guardaespaldas. Resolver este asunto como un adulto, ¿bien?"

"Papá.."

"Tengo una reunión con los ministros. Nos vemos en la cena."

"Papá, por favor.."

- Su padre simplemente sacudió la cabeza mientras tomaba los documentos, antes de salir del estudio. Donghae suspiró, enserio, estaba consiguiendo un nuevo guardaespaldas de nuevo.

"Aiiish!"