No planeaba amarte! (EUNHAE)

Capitulo 15

Donghae miró por la ventana. Podía ver a los dos muchachos que estaban parados en medio del campus con escobas mientras limpiaban. Estaban allí desde el primer período y en ese momento ya estaban en el tercer período, el último antes del descanso. No sabía cuando terminaría el castigo y no podía mentirse a si mismo; estaba preocupado por Hyukjae después de que el chico fue golpeado tan duro.

No entendía el por qué Hyukjae también tenía que cumplir la sentencia, ya que él claramente fue la víctima.

Finalmente, sonó la campana señalando el turno libre..

"Chicos! Pueden salir ahora." - gritó el maestro mas alto.

La clase saltó de sus asientos esparciéndose por el aula y finalmente salieron. Donghae respiró hondo mientras se levantaba. Quería encontrar a Hyukjae. Salió de la clase y pasó por el pasillo algo lleno de gente. Cuando llegó a la planta baja, vio a Choongki salir del campus pero no vio a Hyukjae por ningún lado. 

Comenzó a recorrer el campus y se detuvo cuando vio al pelinegro que estaba tendido en el asiento de la plaza que estaba frente a la cancha de fútbol. 

"Hyukjae!" 

- Hyukjae levantó la cabeza, pero volvió a su posición cuando vio que era Donghae.

"Hyukjae.." - se acercó a él.

"¿Qué quieres?" - preguntó la voz ronca en tono frío. Donghae hizo una mueca.

"¿Estás lastimado?" - preguntó. Hyukjae se sentó y Donghae pudo ver la niño estremecerse debido al movimiento.

"¡Estoy bien!" - gritó.

Donghae miró al chico. "Solo quiero ayudarte." - murmuró.

"¡No necesito tu ayuda ni de nadie!" - le habló Hyukjae.

"Y una cosa más. ¡No trates de acercarte a Choongki o a Junho si no quieres que vuelva a ocurrir lo mismo!" - Hyukjae se levantó la camisa para mostrarle el moretón purpura que se iba formando en su cuerpo. Donghae ensanchó los ojos sorprendido.

"¡Hyukjae!" 

- El pelinegro lo miró furioso. "¡Recuerda. Solo métete en tus propios asuntos!" - se levantó. Tomó algo de su chaqueta y se lo lanzó a Donghae..

"¡Toma tus medicamentos!"

- Donghae apretó el kit de píldoras con fuerza. 

"¡Yah! Si quieres que me ocupe de mis propios asuntos, debes preocuparte de los tuyos también. ¡No tienes que tomar esta píldora por mí! Sé cuando necesito tomarla. ¡No tienes que recordarmelo!"

- Hyukjae apretó los dientes. "¡No quiero que vuelva a ocurrir lo mismo!" 

"Eso no es asunto tuyo. ¿Por qué quieres preocuparte por ello?"

Hyukjae apretó las manos en un puño. Miró a los ojos de Donghae y dijo: "Porque debo hacerlo."

- Donghae se burló. "¿Que debes hacerlo? ¿Qué quieres decir? ¿Solo porque has sido testigo cuando me desmayé? ¿Porque eres tu quien me salvó de ellos? ¡Eso fue una coincidencia Hyukjae! Todo el mundo que vea una situación así me ayudará, pero desafortunadamente tú estabas allí!" 

"¿Desafortunadamente?" - Hyukjae fingió una risita. "Si. Soy una persona desafortunada. Desafortunada por tener que conocerte." - dijo en tono plano antes de abrirse camino. Dejando a Donghae solo allí, quien aún aferraba el paquete de píldoras con fuerza.

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Hyukjae decide abandonar la cancha de basquetbol después de una hora que se sentó allí después del entrenamiento y de no tener ninguna señal de que Donghae llegara para aprender sobre el juego. Lo esperó, porque le había prometido al muchacho que le enseñaría hoy después de clase. Incluso si tuvieron una pequeña pelea esta mañana. Suspiró, agarrando su bolsa listo para salir hacia el pasillo. Caminó, pasando lentamente por la zona de la piscina que estaba a un lado del pasillo del gimnasio. Se detuvo cuando vio que el chico moreno estaba charlando alegremente junto a Daehan.

Y se dirigió lentamente hacia el dormitorio. Realmente quería reírse de sí mismo. Lo esperó por casi una hora con el cuerpo adolorido mientras el niño estaba felizmente saliendo por ahí con el nadador. Eres patético, Hyukjae.

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Una vez que Donghae llegó a la habitación, encendió el interruptor y encontró al pelinegro durmiendo sin cambiar su atuendo. Donghae suspiró. No podía olvidar su pelea de esta mañana. No podía entender porqué el chico actuaba así. Si el lo odia por haber sido su compañero de cuarto, ¿porqué entonces lo ayudó? Debió haberlo dejado morir.

- Volvió a mirar al chico cuando éste se movió y un gemido salió de sus labios. Su camisa estaba ligeramente levantada y revelaba un moretón púrpura en su estómago. Donghae se sintió mal de repente. Por su culpa, el chico había sido golpeado duramente por Choongki. Se acercó lentamente a la cama del joven. ¡No Donghae! ¡No hagas nada! ¡Métete en tus propios asuntos ¿recuerdas?

Se detuvo y retrocedió. Sacudió la cabeza. ¡Está bien! Sólo métete en tus propios asuntos!. Estaba a punto de darse la vuelta, tomando la decisión de ignorar al chico, pero no pudo hacerlo cuando vio que las facciones del pelinegro mostraban dolor. Su frente estaba fruncida mientras su cabello estaba empapado de sudor. Su piel se estaba volviendo extremadamente pálida. 

- Donghae tragó saliva mientras colocaba lentamente su palma en la frente de Hyukjae y la otra en su propia frente para comprobar su temperatura.

"¡Dios mio! ¡Está mas caliente que yo!" - Donghae comienza a entrar en pánico. "¡Hyukjae! ¡Tienes fiebre!" 

- El pelinegro gimió. "¡No me toques!" - empujó la mano de Donghae y movió su cuerpo hacia la pared, cubriéndose la cabeza con la almohada. 

"Incluso estando enfermo, todavía eres arrogante." - el moreno comentó, pero Hyukjae simplemente le respondió con un zumbido. Donghae frunció los labios, pensando qué debería hacer con el chico. ¿Debería llamar a Daehan para pedirle ayuda? ¡No! Daehan debe estar cansado después de su duro entrenamiento de hoy. Parpadeó. ¿Debería llamar al guardaespaldas Jung?

- Sin pensarlo demasiado, rápidamente agarró el teléfono e hizo una llamada telefónica. 

"Hola, guardaespaldas Jung. Soy yo Donghae." - dijo casi susurrando. "No, estoy bien. Es sobre mi compañero de cuarto. ¡No! ¡No! No está metido en problemas. Guardaespaldas Jung, tiene fiebre y no sé que hacer. Su temperatura es bastante alta. Una cosa más, fue golpeado por alguien esta mañana y su estómago tiene un moretón. Si, guardaespaldas Jung. Te esperaré." - colgó el teléfono después de terminar de hablar. 

El guardaespaldas prometió estar allí en menos de treinta minutos.