La Caja

Tiempo

Me miró directo a los ojos preguntandome: ¿cuál es tu miedo más profundo?

Su mirada era limpia y profunda, sin ningún rastro de debilidad. Movía todo dentro de mi ser, mi corazón se aceleraba con cada segundo.
Era sentencia de mi alama desnuda.
-Tus ojos- pensé en voz alta. Claro no era mi respuesta, lo sabría ella después, pero en ese momento solo podía pensar en ellos.

-Es la primera vez que me lo dicen- contestó entre risas, conservando aun así esa mirada penetrante.

-¿Y el tuyo? Debes tener uno, quizas la muerte... - pregunté inocente.

-Muy cerca, es algo peor... el tiempo...

-¿El tiempo?

-En una hora... un minuto... una fracción de segundo, todos los lugares donde fuiste, todo lo que alguna vez que escuchaste, tu familia y amigos, todos pueden desaparecer. El tiempo trae olvido... así como olvidarás esto cuando despiertes-

¿Qué dices?-Pregunté algo atonito-

-Tic tac, tic tac-. Sonaba su voz, adquiriendo cada instante un tono más mecanico y uniforme. -Nos volveremos a ver-.

Desperté algo cansado esa mañana, 6:30, me quedaban 30 minutos para descansar, y una vida completa para recordarte.