Fantasía incredula

2 0 0
                                    

Y eramos los humanos reunidos en nombre de la paz, con pecho prieto cabeza en alto; apuñalandonos unos a otros sin motivo ni emoción.
Al revelo del silencio, dirijo mi parca mirada. Ya no hay hordas aclamando armonía, ya no queda nada. Somos criaturas de paz, con una existencia sobrevalorada.

La Caja Donde viven las historias. Descúbrelo ahora