Destinos Entrelazados [Sinbad-Reader]

Capítulo 10

- _____- la llamo Jafar- ¿estás bien?- le pregunto algo preocupado

Desde que se habían subido al barco la muchacha había estado muy callada, parecía que su cabeza estaba en otro lugar.

- Si... solo estaba pensando- le respondió la muchacha mirando el mar- me pregunto si... fue buena idea dejar a Sin solo en Reim...

Luego de haber hablado con aquel hombre _____ había vuelto como si nada hubiera pasado, después de todo lo que habían discutido no tenía relación con Sinbad o los demás. Era sobre ella, sobre su posición como "Princesa" y sobre el futuro que le esperaba a su familia, Sinbad no tenía porque interesarse, o eso era lo que ella pensaba.

- Estará bien- dijo Hinahoho regalándole una sonrisa tranquilizadora- Sinbad sabrá como arreglárselas solo...

Ella asintió y volvió a perderse en las suaves olas que golpeaban el barco.

Luego de que fueran "estafados" con la exclusiva mercancía que traían desde Imuchakk, Sinbad y _____, hablaron sobre que debían hacer, Sinbad había sugerido volver de inmediato a Imuchakk ya que era un viaje largo, él se quedaría en Reim con el fin de conseguir información y quien sabe que otras cosas más, _____ se había negado a dejarlo solo ya que conocía demasiado al Conquistador y sabía que podría hacer alguna locura, pero había terminado arriba del barco junto con el resto de sus compañeros de viaje.

- Me pregunto, como estará el Capitán Dragul...- hablo Vittel

Esa era otra de las dudas que rondaba en la cabeza de la muchacha, su preocupación por el Capitan se había hecho cada vez más grande y angustiante, después de todo tanto ella como el sabían lo que le esperaba en Parthevia...

- Espero que Dragul esté bien...- comento al aire la de ojos dorados- solo espero que este bien...

[Narpolia, Imperio Reim]

"Uno, dos, tres, tengo tres monedas de cobre, esto es todo lo que tengo en este momento... ya que le di todo lo demás a _____ para que regresaran a Imuchakk, tengo que encontrar una manera de sobrevivir con solo esto..."

Nuestro querido conquistador, había permanecido en Narpolia, aunque hubiera preferido que ____ se quedara con el haciéndole compañía, le había dicho que fuera con Hinahoho y los demás.

- ¡Tienes algo de valor para tocar mi mercancía aquí! ¡eso es robar, sabes!- exclamo un furioso comerciante

- ¿robar? ¿yo?, te equivocas, yo vi una rareza y casualmente lo recogí para verla mejor, eso es todo- se defendió el acusado- ¿Qué es esto? Si el dinero puede aliviarte, si me lo permites, ¿Cuánto cuesta?

- ¡Bastardo! ¡Vamos a ver si puedes seguir burlándote de mí, después de que te rompa la nariz!- exclamo el ofendido comerciante mientras levantaba su puño dispuesto a golpear al acusado

- ¡Detente!- exclamo el Marino de cabellos purpuras mientras le sujetaba la muñeca al comerciante impidiendo que lastimara al otro hombre

Como de costumbre, el muchacho había metido sus narices tratando de salvar a aquel hombre al cual ni siquiera conocía, cediéndole al comerciante las únicas tres monedas de cobre que tenía con el fin de arreglar aquel problema, además de disculparse reiteradas veces con el amargado comerciante.

- ¿está usted bien?- le pregunto al "acusado"- mejor tenga cuidado...

- Si el dinero puede arreglarlo, ya dije que pagaría...- le respondió el encapuchado- te entusiasmas fácilmente- suspiro

- Bueno... me voy por allá, adiós- le sonrió algo nervioso mientras le señalaba una dirección

Su traicionero estomago rugió en ese momento, recordándole que había terminado perdiendo el único dinero que tenía. El encapuchado sonrió divertido riéndose levemente del avergonzado Conquistador de Calabozos.