Destinos Entrelazados [Sinbad-Reader]

Capítulo 13

[Reino de Artemyra]

El viaje por el gran acantilado había tomado más tiempo del que Jafar había pronosticado, el sol estaba ya a punto de ponerse y aun no veían rastros de civilización, el cansancio y la fatiga que tenían cada vez era mayor, comenzando por el Imuchakk y el Conquistador que parecían ya casi dos ancianos caminando con bastón. Cuando finalmente la luna se apodero del cielo pudieron descansar del abrazador calor de Artemyra.

Mystras se adelantó un poco del ya agotado grupo, con una sonrisa radiante en los labios una luz de esperanza había aparecido frente al extravagante Grupo de la Compañía de Sindria.

- ¡Miren todos! ¡Ha anochecido!- exclamo el de Sasan

Sus ojos se llenaron de emoción al ver dentro de un acantilado finalmente su destino.

- Esto es... ¡Artemyra!

Parecía que los 4 habían regresado a la vida al ver el hermoso Reino escondido entre los acantilados, caminaron por la ciudad viendo a las hermosas mujeres montadas en sus gigantescos pájaros pasearse casi sobre su cabeza, estaban completamente alucinados.

- Es muy diferente de Sasan e Imuchakk- comento el de ojos ámbar- un país con su propia y única cultura, hay muchas cosas que solo pueden ser aprendidas al verlas en persona...

- Pero, por favor no piensen que estamos aquí para hacer turismo- les advirtió Jafar- Artemyra nos dio permiso de entrar al país solo después de mucha correspondencia, me gustaría decir que vayamos al palacio justo ahora, pero....

- ¡Apestamos!- chillaron Mystras y Hinahoho al sentir el fétido olor que desprendían sus miserables cuerpos

- Supongo que eso es algo natural, para 4 chicos que pasaron todo el día escalando el acantilado- murmuro el albino olfateando su brazo para hacer una mueca de desagrado- antes que vayamos hacia el palacio, vamos a buscar alojamiento en alguna posada y darnos un baño

Luego de andar un poco más por la ciudad y enterarse que no había ningún hospedaje además del que se podría encontrar en el barrio rojo, contra todo pronóstico se dirigieron a él... en realidad, Sinbad y Mystras parecían demasiado animados con la idea, mientras Jafar pensaba en los miles de problemas que podría causar el de los Djinns.

Pero luego de haberse bañado, se dirigieron directamente al palacio, habían llegado a la prueba más difícil.

Todas las instrucciones que _____ le había dado a Jafar, las había repetido para los demás debían permanecer en Artemyra sin causar problemas hasta la llegada de la castaña.

- Viajaron admirablemente desde una tierra lejana, Su Majestad esa esperando... por favor... pasen por aquí...- les informo una hermosa guardia del palacio- aunque, no pongan a prueba la paciencia de Su Majestad... asegúrense de ser sinceros y no sean desconsiderados...

Avanzaron en silencio por el palacio hasta llegar donde la reina, los 4 se arrodillaron frente a ella.

- Su Majestad, la Reina, nosotros la compañía comercial de Sindria, estamos realmente honrados de que nos haya concedido una audiencia- hablo el de los Djinn- soy el jefe de la compañía, Sinbad, soy un comerciante que trabaja en Reim y viaja por todo el mundo...

El silencio que había inquieto a Sinbad y Jafar, quien no dudo en preguntarle a la silenciosa reina si la habían ofendido, unas carcajadas se escucharon desde sus espadas, la hermosa guardia de cabellos dorados estaba riéndose de ellos.

- Ah... eso es divertido- exclamo- son los primeros visitantes del exterior que hemos tenido en mucho tiempo... les quería jugar una pequeña broma