Cómo Tolerar A Park Chanyeol 《CHANSOO FANFIC》

34: Intromisión

Dedicado a LisaLou9
Feliz cumpleaños, belleza 😘 (me vale que ya haya pasado xD)

El tiempo del Park Chanyeol divo regresó unos días después de que perdiera el sentido del gusto en la lengua.
Nunca supe si fue mi culpa o fue que se cansó de socializar con nosotros. Lo único que sabía es que me hacía falta su otra cara. La divertida.

Sehun y Baekhyun eventualmente acabaron teniendo la misma cantidad de tensión sexual que Chanyeol y yo, pero ellos no se odiaban a morir así que todas las noches me preparaba mentalmente por si decidían acabar con la tensión.

Chanyeol nuevamente pasaba más tiempo fuera que en casa y eso hasta cierto punto era relajante. Pero, debido a cierta pareja de idiotas, era super incómodo estar cerca de ellos dos (hasta Toben y Vivi huían cuando los veían juntos).

Entonces utilizaba cualquier excusa para salir. Sacar a pasear a los perros, grabaciones, citas imaginarias, citas forzadas con el líder, alguna película en estreno, castings; lo que fuera. Solo quería estar lejos de la burbuja de amor y sexo que tenían esos dos.

Pero, ojo, ninguno de los dos era gay. Cada vez que hablaba con alguno -a solas, claro está- sobre el asunto, los dos respondían lo mismo: "no soy gay". Gay o no, los dos se miraban con ganas de comerse a besos y eso daba asco.

Un día de tantos en los que estaba encerrado en mi habitación porque los tórtolos estaban en la sala, Chanyeol entró a mi habitación sin avisar y se sentó en el piso junto a mi cama, celular en mano, sin decir ni una sola palabra.

-¿¡Qué te pasa!? -Le reclamé, golpeándolo con una almohada.

-Cállate, ¿sí? -Fue su única respuesta, sin dejar de mirar su celular.

Me alejé, mirándolo con odio y lo que podría ser un puchero. Continué leyendo mi libro con tranquilidad pero hubo algo que me dio mucha curiosidad. ¿Qué tanto hacía Chanyeol con su celular? Siempre estaba en él y nunca sabía qué mierda estaba haciendo.

Sabía que preguntar no daría ningún resultado, así que decidí fijarme desde mi asiento.
Parecía una red social pero no llegaba a ver exactamente qué había en la pantalla del celular.

Me intenté acercar sin que se diera cuenta pero, cuando volví mi mirada del libro para intentar ver, el celular había sido bloqueado.

-¿Podrías ser menos obvio?

¡ABORTEN LA MISIÓN!

La sangre llegó a mis mejillas al escuchar su voz perezosa reclamar, hablando con la vista perdida en el suelo.

-¿Eh? No sé de qué hablas...

-¿Nunca te enseñaron que es de mala educación ver las cosas ajenas? -Por fin se volteó a mirarme.

Mis mejillas se sintieron explotar al mirarlo detenidamente. Tenía un rostro algo cansado, pero no por eso se veía menos atractivo. Su cabello estaba un poco despeinado y su ropa estaba alborotada. Se veía jodidamente sexual y que me estuviera viendo desde abajo no ayudaba.

-¿Por qué estás en mi habitación? -Fue lo único que atiné a responder. Si él había entrado sin permiso a mi habitación, yo podía ver lo que estaba haciendo, ¿no?

¿No?

Abrió la boca para contestarme y vi en sus ojos toda la intención de decir algo grosero, pero una voz lo calló.

Quedó estático, al igual que yo.

-Hunnie~ -Otro gemido se escuchó unas habitaciones más allá.

Bueno, esto era incómodo...