Capítulo 2

59 4 0
                                    

POV MATTEO

Luego de lo que había ocurrido aquel día tan extraño, cada noche que pasaba no dejaba de pensar en aquel chico que atrapó en sus brazos antes de caer, su mente no le daba tregua al pobre joven, haciendo que al recordar esos ojos marrones y sus facciones le hicíeran suspirar, dándose cachetadas mentales siempre que pasaba esto por su mente. Aveces intentando ver un poco de anime para distraerse, pero siempre terminando en lo mismo, sacudiendo su cabeza intentando olvidarle "¿Que coño me pasa? Si yo soy Hetero..." o eso es lo que él quería creer.

Luego de otra noche sin dormir demasiado, decide levantarse e intentar hacer que nada había pasado, dirigiéndose al baño a paso lento, que al llegar a su destino se mira de reojo en el espejo, lo que hace encontrarse con una versión de él mismo algo cansado y su cabello ya crecido alborotado, luego de cepillar sus dientes, decide darse una ducha larga para luego colocarse su típica ropa deportiva ya que quería ir a trotar un rato para despejar su mente e intentar volver a verle, quizás y así su mente le daría tregua y aclararía sus ideas al respecto ¿no?

Luego de alistarse y comer un desayuno rápido, toma su mochila y deposita ahí dos termos con agua y una toalla, ya con esto dentro la cierra y se dirige hacia a la puerta, pero cuando recuerda que ha dejado su teléfono y audífonos, vuelve a su habitación, tomándolos de la mesita de noche, pero cuando otro objeto se cuela en su campo de visión se para y lo observa, El Reloj de Flavio...

Convencido de volver a ver al chico para sus antiguas razones, toma el objeto y lo introduce en su bolsillo, retomando su salida.

Luego de recorrer unas cuantas calles con la compañía de las canciones de su lista de reproducción preferida intentando apaciguar la gran ola de pensamientos, preguntas  e inseguridades que recorren su mente: "¿Estará por aquí?, Y si me encuentro con él ... ¿Qué le digo?, ¿Me hablará? Ay Matteo eres tonto ni que fuera mudo... ¿o si?, ¡Verga que piensas! Si tú mismo escuchaste esa ronca y a la vez linda voz..." Luego de sacudir su cabeza y darse unos buenos coñazos mentales se da cuenta que se encuentra en el parque local, el cual le hace encojerse de hombros e irse a sentar a una banca al sentirse algo exhausto, ya que al haber estado pensado todo este tiempo no se percató de los kilómetros que había recorrido.

Tras haberse sentado recuperando algo de aire, saca su termo de la mochila y bebe un largo trago del agua fría haciendo que se relaje un poco, recostando su espalda en aquel banco y observe por primera vez en el día el lugar donde se encontraba.

Posa su mirada en las personas a su alrededor, algunos corriendo, niños montando sus bicicletas o haciendo burbujas de jabón y jugando con otros a explotarlas... unos que otros solitarios leyendo bajo los árboles y algunas parejas transmitiendo su saliva sin importarles las miradas, y cuando el chico creyó que su mente se había calmado con el tema, se preguntó el mismo cual de esas personalidades tendría aquel chico de ojos marrones, recordando que tenía su reloj en el bolsillo, tomándolo y viéndolo nuevamente dejando a sus pensamientos tomar el control de sí una vez más...

Cuando vuelve a percatarse de lo que le rodea, sin saber cuantas horas había permanecido en esa banca, sintiendo su estómago rugir del hambre, haciendo que se levante y decida volver a su casa, subiendo el volumen de su música al máximo para sólo concentrarse en la vuelta a su hogar y la canción de electrónica que sonaba, nada más.

Al llegar a su hogar algo desilusionado por no ver al chico, y también algo tonto por no prestar el 100% de atención a su alrededor, coloca su teléfono a cargar y desconecta los auriculares para que la música siga sonando, dirige la mirada al reloj de la cocina que marca las 4:58 de la tarde, levanta las cejas en forma de sorpresa y suelta un suspiro para luego abrir la despensa y prepararse algo rápido de comer, junto a un merecido capuchino italiano. Cuando termina sin importarle que acababa de comer, quita la música y va al baño a darse otra larga ducha.

Cuando termina opta por colocarse su típico pijama, sentía que ese día ahubiera sido calificado como"normal" si no hubiese pensado tanto en... "Tranquilo Matteo, ya pasará" Dice para sí mismo mientras toma su celular ya cargado, revisando su canal de YouTube, levantando levemente la comisura de su labio en una pequeña sonrisa al ver que había crecido tan sólo ese día unos 59 Subs para ser exacto, cosa que le encantaba, recordando que tenía que grabar algo el día siguiente.
Ya que Twitter es la red social que más usa, habían varios comentarios que se preguntaban que, qué le había pasado pues tenían más de una semana y media sin subir algún vídeo. Este prometiéndoles un nuevo capítulo de un juego que estaba rondando y que le había llamado la atención, Para luego recostar su cansado cuerpo en la cómoda cama, que pasados los minutos dejandose ir por un gran sueño profundo con su móvil aún en mano, y una reciente novedad de mensaje en Twitter sin revisar...

"@YoSoyYOLO
YOLO.      

-Eh, Hola creo que te he
encontrado, señor roba relojes y
Malo para enfermero jajaj
-Ojalá que hayas sido tú...
Y si ese es el caso
- ¿Podríamos vernos?"

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 20, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Amor entre Youtubers ^^Donde viven las historias. Descúbrelo ahora