Sabor a nada.

24 1 0
                                    

Llego al punto en el cual me siento manejado por mi propia monotonía,

Comer sin hambre, dormir sin sueño, vivir sin vida, llorar sin melancolía, y escribir un intento de poesía

Miró a mi alrededor y todo corre deprisa, las personas no cambian, tal vez cambie yo,

Me alejo de lo malo, pero más lejos de lo bueno, ya no arriesgo, sé que no ganó pero tampoco pierdo, y al final, sin morir muero.

SinestesiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora