TATUADO // JH

T R E I N T A Y C U A T R O

Sam

—Te juro que no era mi intención interrumpirlos— Dijo Rachel por tercera vez

—Sí Rachel, ya entendí— Dije poniéndome una blusa limpia

—Pero es enserio, Sam.

—Ya entendí, mejor dime qué es lo que te dió Finn.

—Un anillo— Dijo emocionada

—¿¡Te pidió matrimonio!?

—No, no es de eso— Dijo rápidamente mientras negaba con la cabeza —Solo es para demostrar “amor eterno”— Hizo comillas

Comencé a reír fuertemente, ella no entendía porque lo hacía.

—¿Amor eterno?

—Sí, eso dije.

—Que tontería— Seguí riendo

—No es una tontería— Dijo —Por lo menos él y yo somos novios.

Me le quedé mirando y ella comenzó a reír.

—No le veo la gracia.

—No entiendo porqué Jeff y tú no regresan, digo, van dos veces que los interrumpo en pleno acto sexual.

—Es medio incómodo responder eso ¿Sabes?— Dije

—Deberían de regresar, amo su pareja.

—Es complicado.

—¿Complicado? Sí ambos se aman, se lo demuestran todos los días, no sé porque no regresan.

—¡Porque Jeff no me lo ha pedido! Por eso no hemos regresado.

Se quedó unos segundos callada y luego sonrió.

—¿Y porqué no se lo pides tú? Quizá el quiere que tú des el primer paso.

—¿Yo?

—Sí, debes de admitir que lo que más deseas en este mundo es regresar con Jeffrey— Golpeó mi hombro

—Sí— Suspiré

De verdad quería regresar con él, aunque ya nos hayamos besado, aún seguimos sin ser nada, pero no por mucho, daré el primer paso.

• • •

La noche había llegado, y hoy era nuestra última noche en la cabaña, y todavía no le había hablado a Jeff, después de lo que pasó esta mañana, no habíamos hablado ni una palabra.

Él entró a la cabaña, y se sentó en el sillón, hizo la mismo rutina, se quitó su camisa y dejó su torso desnudo, se quitó su pantalón y se puso uno más cómodo y luego se acostó en la cama, conmigo.

—Hoy no hemos hablado— Rompió el silencio que había entre nosotros

—No, no habíamos hablado en todo este día.

—Sam, necesito decirte algo— Me miró

—Yo también— Lo miré

—De acuerdo, lo diré yo primero.

—Bien— Asentí

—Te necesito.

—Me tienes aquí— Dije y él soltó una leve risa

—No hablaba de eso. Te necesito de verdad, necesito poder besarte frente a todos, necesito poder abrazarte cuando tienes frío, necesito estar contigo en todo momento... necesito que regresemos. Yo sé que tú también lo quieres, y por eso te pregunto —Suspiró y mi corazón comenzó a latir rápidamente, se acomodó mejor, de tal manera que nos veíamos frente a frente —¿Quieres volver a intentarlo?

Sentía que mi corazón se iba a salir de mi pecho, estaba más emocionada que cuando me pidió que fuéramos novios la primera vez, sonreí y luego lo abracé. Me acerqué a sus labios y los besé con necesidad e intensidad.

—Por supuesto.

Volví a atrapar sus labios, y los besé con la misma intensidad que lo hacía hace tiempo. Con Jeff tengo los mejores besos de mi vida. Es como si supiera perfectamente lo que necesitas y cuando lo necesitas.

—Te amo— Le susurré y él sonrió mostrando su perfecta dentadura

—Yo también, te amo.

Lo abracé y luego lo volví a besar, por fin Rachel no nos podría interrumpir.

Me subí sobre él, coloqué mis rodillas en cada lado de su cuerpo, pasé mis manos por su pecho descubierto, dibuje cada tatuaje que tenía. Mientras tanto él me miraba con una sonrisa. Colocó sus manos en mi cintura y comenzó a acariciar mi espalda. Me acerqué a sus labios y lo volví a besar, amo sus besos. Comenzó a besar mi cuello mientras que yo pasaba mis manos por sus brazos bien trabajados, con sus manos desabrochó mi sostén y luego lo tiró por alguna parte de la cabaña. Sentía su masculinidad que rozaba con mi feminidad, era una sensación agradable. Le quité sus pantalones dejándolo solo en bóxers. Atacó mi pecho derecho y yo pasé mi mano por cada cuadrito de su abdomen, lo extrañaba tanto. Paso a el otro pecho, lo lamió, beso y mordisqueó. Él sabe cómo hacer disfrutar a una mujer. Tomé el elástico de su bóxer y comencé a jugar con él, volví a sus labios. Metí mi mano por debajo de su bóxer y él gimió en mi boca, un escalofrío recorrió mi cuerpo al escuchar ese sonido, sonreí por lo que yo le causaba. Comencé a darle placer mientras él solo disfrutaba.

—Sam— Suspiró

—¿Qué, Jeff?— Dije con una sonrisa

—Dentro...

—¿Cómo?

—Me corro...

Sonreí con malicia y luego dejé de darle placer. Le quité sus bóxers y me deshice de el resto de mi ropa también, lo siguiente que hice fue introducirme en él. Solté un pequeño gemido por la satisfacción, más de 5 meses sin sentirlo, aguante mucho.

Nos acomodamos de mejor manera y él comenzó a moverse lentamente, mas luego fue aumentando su velocidad, me besó y mordió mi labio inferior, dejó besos húmedos en mi cuello mientras seguía con sus embestidas. Rasguñe su espalda cuando ambos llegamos al clímax, soltamos un gran suspiro y luego él cayó sobre mí.

—Te extrañé— Oí que rió

—Yo igual— Dije y luego lo abracé