Fijación en ti ©

42 3 0
                                    

Hola, me llamo Raquel.

Todo comenzó un 1 de julio de 2013, como todos los años había un campamento en donde yo hacía equitación, este era mi segundo año e iba totalmente ilusionada el primer día.
Este día trataba en conocernos, formar grupos para los juegos y, sobre todo, pasarlo genial.
En los grupos acabamos mis amigas con otras tres chicas más, ya que eran de nuestra edad, en el mismo grupo.

La semana transcurrió como me la esperaba, disfrutando de cada día al máximo sin aburrirme ni un solo segundo, pero ocurrió algo extraño, y es que empecé a tener como una fijación por una de las tres niñas nuevas del grupo, su nombre era Carlota.
Carlota y yo hablábamos, pero tampoco mucho, eran solo cosas graciosas o cosas del grupo ya que no teníamos mucha confianza.

Finalmente llegó el día, el día que terminaba el campamento y nadie quería... todas disfrutamos de cada día y claro, esto hizo que se nos hiciera tan corto. Todas nos despedimos con tristeza y nos fuimos a nuestra casa, otras de vacaciones...

Pasadas las semanas empecé a hablar de una forma u otra con Carlota, esto era extraño porque desde que me habló el primer día no dejamos de hablar ni un minuto, así pasó un año hablando día tras día.
Al siguiente verano no hubo campamentos, con lo cual organizamos una cena allí, en el club de equitación. Estábamos todas, todas las del grupo y claro, como no, ella, Carlota. Yo estaba un poco tímida con ella pero a la vez con ganas de estar a su lado, pero mi timidez no me dejaba actuar como realmente quería.
La noche pasó y nos echamos varías fotos todas juntas, jugamos, nos reímos...

A los pocos días quedamos de nuevo todas juntas, pero esta vez para ir a ver una película, recuerdo estar muerta de miedo, al lado de Carlota y cogida de su mano, poniendo de "excusa" que tenía miedo...

Mi sorpresa fue mayor cuando un día dijo de quedar Anna (una del grupo), ella y yo en su casa para ver pelis de miedo y quedarnos a dormir, yo toda nerviosa acepté el plan y solo deseaba que llegara ese día.

Llegó el día, un viernes si no recuerdo mal, llegamos a casa de Carlota, cenamos y comenzamos a ver pelis, Expediente Warren... claro, ya he dicho que las películas de miedo no son mi género preferido, así fue que otra vez acabé con la misma excusa y de la mano de Carlota. Toda la noche fue igual, yo muerta de miedo sin moverme del sitio.
Y por fin terminó la película, nos fuimos a la habitación y repartimos las tres camas, estábamos hablando hasta que no aguantaba más y subí a la cama de ella, corriendo apagó la luz y dijo "a dormir", para mí sorpresa seguíamos de las manos hasta que me las soltó y se dio la vuelta dándome la espalda, no podía estar ni un segundo alejada de ella, sin pensarlo dos veces me abalancé sobre su espalda y la abracé.
Se podría decir que fue una noche extraña, yo no me lo creía, la chica por la que había empezado a sentir cosas tan fuertes acabó haciéndome cosquillas, dándome besos en la mejilla, abrazándome, agarrándome la cara... llegamos a tal punto que nuestros labios se quedaban a centímetros los unos de los otros...

Amaneció y yo la verdad es que no había pegado ojo en toda la noche disfrutando de cada caricia que ella me daba. No puedo explicar la complicidad que había entre nuestras miradas ese trece de septiembre...

¿Quién dice que el 13 da mala suerte?💍🤞🏼

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Aug 19, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

TreceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora