La primera amistad

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Asmita siempre fue un niño solitario. Desde pequeño había sido rechazado por la sociedad a causa de su ceguera. No era muy querido en el Santuario a causa de sus costumbres extranjeras. No era de sorprender que Asmita se haya interesado en aquel joven que siempre vivía en las sombras.

Defteros era un joven solitario quien siempre tuvo de compañía a su hermano quien también era su amor. Vivía en las sombras. Nadie conocía su existencia en el Santuario a causa de haber nacido bajo la estrella de la desgracia. No era de sorprender que Defteros haya terminado aceptando la amistad de aquel marginado. 

-De nuevo tu aquí-Defteros gruño mientras observaba desde las sombras al niño de doce años que se encontraba de pie dentro del Templo de Géminis. El niño que siempre mantenía sus ojos cerrados sonrió causando cierta irritación en el gemelo menor-Si mi hermano te descubre...... te matara- 

-No le tengo miedo al caballero de Géminis. Además eso podría traerle serios problemas-replicó Asmita causando un gruñido por parte de Defteros. 

-¿Qué haces aquí?-Asmita no respondió pues ni el mismo sabía que hacía aquí. El aburrimiento que habitualmente sentía había causado en él cierta intriga por aquella tímida presencia que a veces sentía cuando el caballero de Géminis pasaba por su Templo. Un día decidió que quería conocer aquella presencia fue por eso que en el momento en que no sintió aquella presencia cuando el caballero de Géminis paso por su Templo, se atrevió a bajar hasta el Templo de Géminis. Ahí fue cuando conoció a Defteros quien parecía ser el hermano gemelo de el caballero de Géminis. Desde ese momento Asmita comenzó a visitarlo cada vez que podía. 

-No lo se-respondió Asmita sintiéndose inseguro sobre que decir. Quedo unos segundos en silencio hasta que al fin se atrevió a hablar-¿Quieres ser mi amigo?-

Los minutos pasaron en silencio. Asmita sintió miedo y se arrepintió de haber dicho esas palabras. Pensó que había sido una mala idea. Pensó que no debió haberse dejado llevar por la intriga. Pensó que debió haberse conformado con su aburrida y solitaria vida. Las lágrimas humedecieron sus ojos que eran cubiertos por sus parpados. Abrió apenas sus ojos dejando que algunas pequeñas lágrimas escaparan. Pero en ese momento una sonrisa apareció en el rostro de Asmita, en el momento en que Defteros dijo las siguientes palabras:

-esta bien. Seamos..... amigos-                 

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⏰ Última actualización: Aug 23, 2017 ⏰

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Momentos de amistad (Saint Seiya: The Lost Canvas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora