El Amante Del Diablo || Reescribiendo ||

|| III ||

Nakamura miraba con cierta nostalgia a aquel hombre sentado frente a ella. Asano carraspeo molesto al no escuchar una explicación acerca de lo que le había sucedido a su hermano.

- No me interesa si existe un puto romance entre ustedes, solo quiero saber dónde está el futuro rey del infierno, tomarlo y largarme de aquí-

Terasaka rodo los ojos ante las quejas del general, no sabía cómo alguien podía ser tan insoportable. Tomo aire para comenzará a hablar y explicar a donde había refugiado al demonio. Antes de que empezara sonó el teléfono, una mueca de disgusto se presentó en su rostro avisando a sus invitados de una posible complicación.

- Tal vez no sea tan necesaria la explicación - 

Asano miro con disgusto a aquel hombre, odiaba que fueran tan incompetentes y estúpidos, sin embargo, no estaban en el infierno y aunque fuera un general, debía de ser prudente dentro de un territorio hostil.

Maehara miraba al nuevo inquilino de Nagisa pasearse por los alrededores de la casa. Isogai simplemente espero el momento para pedirle al de hebras celestes irle a comprar algo. Nagisa no se negó y obedeció.

- Hacía tiempo no sabíamos de ustedes, pero me atrevo a preguntarle por qué se encuentra en el hogar de este humano -

- Siempre tan formales, no me sorprende en realidad. Somos profesionales de cualquier modo -

Maehara realizó una mueca de disgusto al escuchar la última frase, ellos no eran iguales, Ni siquiera se acercaban a estar cerca de ello, Ellos luchaban por proteger a los humanos, pero los demonios no, ellos solo tomaban lo que deseaban, usaban a quien querían sin pensar en las consecuencias, incluso asesinaban personas por diversión. Claramente, no eran iguales.

- Tú no perteneces aquí, quiero que te alejes de él -

Los ojos del contrario brillaron ante la orden que le habían dado, Karma se levantó y lo tomo del cuello enfocando su energía en su cuello.