Evu Asistió a la escuela, Gerardo tenía pena de hablar con ella hasta que en una clase terminaron discutiendo. Al terminar el día de clases, ambos tomaron su camino a casa.
De camino a casa de Evania, en el transporte al que abordó sube un delincuente a asaltar el transporte.
– ¡Ahora si ya los cargó la verga! – Grito el maleante agitando su arma – denme todas sus cosas hijos de la chingada o me los vuelo aquí mismito!
Tenía una pistola en la mano
– (Quizás si esté cargada) – Pensó Evania – (se le nota pesada)
La gente, asustada, comenzó a darle sus pertenencias a este sujeto. Al llegar con Evania, ésta no tenía nada de valor y el sujeto sin pensársela le vació el cargador disparándole en la cabeza.
Evania estaba inmóvil en el asiento luego de que el sujeto le disparara tan cruel y sádicamente. El delincuente tomó a Evania y bajó del vehículo.
El maleante la tiró en unas alcantarillas que había cerca y se fue dejando el cuerpo de Evania ahí.
Después de unos instantes, Evania despertó, se levantó lentamente confusa y se dirigió a su casa. Al verla llegar, uno de sus vecinos se exaltó.
– Evania, ¿Qué te pasó?, ¿Quién te hizo esto? – Dijo su vecino
– ¿Dé qué hablas? – Preguntó Evania confundida y perdiendo el conocimiento
– ¿Todavía me preguntas que porque estoy así?, Mírate, tienes sangre por todos lados
– ¿Sangre? – Evania no sabía que estaba su cabeza llena de sangre seca – No me pasó nada Señor estoy bien – Evania entró a su casa, se dirigió al baño y notó toda la sangre.
Evania no pudo creerlo, ella pensó que lo que le había sucedido en el vehículo era un sueño, pero no, además de que su espalda tenía unos gramos más de peso sin contar su mochila. Evania se limpió y observó que no tenía ninguna cicatriz en su cara, ni siquiera las que le habían dejado el acné. Tomó un baño dado que ella apestaba pero al llegar a la cama no pudo dormir pensando en todo lo que sucedió.
Al día siguiente encontró a Gerardo
– Gerardo, no sabes lo que me pasó anoche
– ¿Qué te pasó? – preguntó Gerardo con ganas de burlarse
– Un sujeto asaltó el micro en la que iba, luego me disparó en la cabeza y mírame, aquí estoy
– ¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAJAJA!!! – Evania se molestó al escuchar a Gerardo reírse – No me tomes a mal Evu de hecho, me da la impresión de que tu vida es más interesante que la mía de hecho, me gustaría acompañarte en tu Aventura que estás viviendo justo ahora.
- ¡Un momento! – Se escuchó una voz al lado de ellos. Era Gael con la cabeza agachada cubriéndole los ojos – A mí también me gustaría ir con ustedes.
- ¿Gael? – Preguntó Evania - ¿Por qué quieres venir con nosotros?
Gael hizo una sonrisa coqueta sin levantar la cabeza, uno de sus dientes emitió un pequeño brillo y dijo – Porque yo creo saber lo que le sucedió a tu madre Evania – En ese momento Gael levantó la cara dejando mostrar su peculiar cicatriz sobre la ceja izquierda.
Evania lo tomó con rabia por el cuello de su ropa - ¿Qué sabes tú de mi familia?
- Valla – Dijo Gael con una sonrisa y alejando la cara de Evania – Tu madre no me dijo que fueras tan agresiva – Gael empujó a Evania del estómago con la rodilla y ésta lo soltó sin pensarlo – No pensé que la reputación de tu padre fuera a repercutir tanto en tu forma de actuar ante las situaciones sin embargo - Gael le extendió la mano – Yo puedo enseñarte todo lo que quieras saber sobre tu familia, al igual que Mértalo y Korpirus también por el incidente del transporte público en el que un criminal te disparó sin piedad en la cabeza por eso – Gael tomó una pose determinante – Quiero ir contigo.
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3.- Nos volveremos a encontrar, Heredera existencial
Science FictionEvu vive bajo las sombras de su padre tiene que ser reconocía a como dé lugar. Se le encarga una misión muy importante solo a ella y se requiere más del poder de los dioses unidos. ¿Podrá con eso?