Capítulo 17: Una mentira a la vez

370 13 5
                                    

Dinah POV.

Me encontraba parada frente a la puerta de la famila Jauregui Cabello, un gran apellido por cierto, no puedo creer que Lauren haya tomado su apellido.
Cierro el puño derecho y rechino mis dientes causando un dolor en mi mandíbula, todo esto ocurrió tan rápido, es como si de la noche a la mañana ya estuviera divorciada, pero eso no ha pasado, aún.

Cuando me di cuenta Camila ya estaba parada enfrente de mi, conmigo sin haberme dado cuenta de que ya había tocado su timbre.

Espere de todo, hasta de un golpe en mi mejilla, pero fuí recibida como la hija pródiga, y sentí los cálidos brazos de la mujer de piel morena envolverme como si no me hubiera visto en años.

"Vamos, que esperas," dijo Camila mirándome extraña, "pasa".

Cuando entré me di la vuelta para verla una vez más, sin esperarme nada de lo que había pasado.

"Lo siento," dije abrazándola, "lo siento tanto, no debí hablarte así".

"No te preocupes, ahora tienes asuntos más difíciles que explicar" dijo soltando el abrazo.

"¿Dónde está el?" Pregunté y ví como alguien salía del baño empujandose.

"Arriba, probablemente siga dormido" dijo Lauren, "vaya que tiene el sueño pesado ese hombre".

"Lo sé, solía ponerle 6 alarmas para que fuera al trabajo" dije suspirando, "regresaré cuando despierte".

"No, seguro despertará en unos minutos, mientras habla conmigo" me dijo Camila llevandome hacia el jardín.

Recorrimos todas las especies de platas, desde jazmines hasta rosas y tulipanes, Camila era una gran fan de las rosas asi que no me sorprendía ver tantas en su jardín, me recordaba a cuando se obsesionaba con boybands de chica, podías encontrar un poster por todos lados de su casa, incluso en el baño, aunque debo decir que Liam Payne viendome defecar no era tan malo.

"¿Vas a hablar ahora?" Dijo Camila sacandome de mis pensamientos.

"Que quieres que te diga, cometí un error, me sentía muy sola y confundida, ese mismo dia me encontré a Siope en el supermercado y hablamos un rato, hasta que vió mi anillo y sin pensarlo me lo quité y le dije que había sido un regalo de mi padre, una cosa llevo a otra y terminamos besandonos en mi habitacion pero me detuve y minutos después encontré a Alex en la casa, asi que me asusté" dije sin balbucear.

"Tienes que decirle eso a Alex, está muy confundido, merece saber tus razones" dijo Camila.

"Aún así no debí haber hecho eso" dije, "¿crees que arruiné nuestra relación por completo?".

"¿Cómo crees eso?"dijo.

"Quiero decir, cuando nuestros hijos nos pregunten sobre nuestra perfecta historia de amor, saldré con un, 'ah olvidé mencionar que engañé a tu padre, ¡pero no es para tanto!" Dije imitandome a mi misma.

"Vamos, has visto todo lo que nosotras hemos tenido que pasar y aun asi permanecemos de pie" dijo Mila tomando mi mano.

"Pero ustedes son fuertes" dije.

"Y ustedes igual, son una oareja unida y no importa lo que pase lo van a superar, ¿me entiendes?" dijo mirandome completamente y asentí.
"Ahora vamos adentro a ver si la bella durmiente ya está despierta".

Cuando entré Alex estaba tomando su café mientras que Lauren estaba pintando sus uñas en la sala.

Cuando Alex me vió se sobresaltó de sorpresa y alejó el café de su boca.

"Lauren creo que tenemos que darles su espacio" dijo Camila.

"Pero mis uñas aun no se secan" dijo Lauren quejándose.

"Ni siquiera caminas" dijo Camila mientras jalaba su silla hasta la salida de la casa y cerró la puert detras de ella.

Me dirijí hasta el sillón y Alex se sentó a mi lado, esperando que hablara.

"Bueno, creo que es tiempo de que te de una explicación...

Lauren POV.

"¿Ves?, no abren, eso significa que no nos quieren es su casa" dije dandome la vuelta en mi silla mientras Camila me jalaba de vuelta.

"Talvez es porque no has tocado el timbre y te la has pasado enfrente de la puerta sin decir nada" dijo mientras tocaba el timbre y yo le remiraba los ojos.

"¡Chicas llegaron!" Dijo mi madre con una sonrisa en su rostro asi que tuve que pretender la mia.

"Pasen" dijo abriendonos lugar para despues gritarle a papá para que bajara.

Cuando lo vi pasar por las escaleras un extraño sentimiento cruzó por mi pecho, tenía tanto tiempo que no lo veía, algo en mi me hizo moverme hasta donde el estaba y en lugar de gritarle como lo habia estado planeando, solo lo abrazé fuerte, sin querer dejarlo ir, el reaccionó de la misma forma.
Me sentía como una niña perdida en el momento en que su padre la encuentra y se siente como en casa.
Comenzé a derramar mis lagrimas sobre su chaleco pero el me lo permitió sin decir nada.

"No vuelvas a irte, porfavor" dije con la voz entrecortada, "no sabes lo mucho que me hacías falta".

"Lo sé hija" dijo y sentí pesada su voz, avisandome que ambos estabamos en la misma posición. "Lo lamento tanto".

"Awww la reconciliación padre e hija" escuché decir a mi madre arruinando el momento, fue ahí cuando me separé de papá.

"Vamos a cenar todos juntos como una famila" dijo mamá.

"¿Dónde está Chris y Tay?" Pregunté.

"Han ido de vacaciones con su tía, se están divirtiendo en Alaska" dijo papá sonriendo.

"¿Ah si?, nunca me llevaron a Alaska" dije curiosa.

"Eso es porque siempre fuiste una muchachita independiente y no viajabas con nosotros" dijo mamá esta vez.

"¿Es enserio?" Dijo Camila, "¿no viajabas con tu familia?".

"Creo que prefería estar sola, siempre fui una persona solitaria" dije tomando de mi vaso.

"¿como pudiste hacer eso?, yo no podría sobrevivir sin mis recuerdos de viajes familiares" dijo Camila.

"Oh vamos como si fueran memorables" le dije burlandome de ella.

"Claro que si, y te los contaré...

Y así fue pasando la noche en casa de mis padres, mientras Camila contaba todas sus historias de viajes familiares desde que era una pequeña niña hasta la edad de hoy, grandes anecdotas como la vez que se le atoró un grano de elote en la nariz y tuvo que ir al veterinarios porque no habían hospitales cerca.
Fué una velada encantadora y muy diferente a las que acostumbraba con mis padres, fué ahi cuando me di cuenta de quien era la persona que cambiaba mis veladas tristes por felices, estaba sentada a mi lado sosteniendo mi mano mientras agarraba su copa de vino con la otra.

No podía pedir por más, y no podía perderla otra vez.

No habría mas peleas estupidas esta vez.

Solo seriamos ella y yo.



\\ F I X   Y O U // Trilogía de The letterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora