5 - Por Alisson...

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[Hans]

La luz apenas atravesaba las maderas de aquél cuarto donde se encontraba tendido el pelirrojo. Entraba por las grietas entre las tablas, alcanzando a posar una pequeña parte de sí misma en el rostro del hombre.

Hans se removió un poco, parpadeando repetidas veces tras despertar. Se incorporó, ordenó su traje y cabello para salir hasta donde se encontraba el capitán y hablar con él. No faltaba mucho, lo sabía por la geografía cercana que los rodeaba, creció en esas tierras. No fue tan malo mientras no entendía lo que sucedía, luego ya no tuvo sentido seguir pretendiendo que eso era una vida.

Todos los recuerdos llegaban a él en ese momento. Cuando fue un joven decidido a obtener Arendelle, cuando conoció a Kristoff, cuando lo lastimó, cuando se dió cuenta de que más daño se había echo a sí mismo al estropear lo único verdadero que alguna vez tuvo. Todo venía como si lo estuviera viniendo a su cabeza, estaba de alguna forma abrumado entre recuerdos cuando acabó por sentirse mareado, jamás le había sucedió eso en un barco pero todo tiene su razón de ser.

Acabó por cubrirse a vomitar en uno de los tachos para meter las escobillas del piso. Limpió su boca y el horrible sabor quedó, pero no podía más que apelar a poder lavar sus dientes con el agua escasa que había, pero lo hizo y rogó que las náuseas pararan.

A la velocidad en la que iban aún quedaban un par de días de viaje, tenía ventaja en caso de que Kristoff, Ana o Elsa lo siguieran, primero ajustaría cuentas, luego regresaría a su vida.

{ Kristoff }

— ¡Guardias! ¡Guardias! Necesito ayuda aquí...— Gritó desde el pasillo donde estaba la mujer desmayada, estaba muy pálida y es que debió saberlo, saber que hablaban de su pequeña Alisson, en ese momento descuidó a Hans, dejó de mirarlo y fue lo peor que pudo hacer.

Cuando por fin vinieron los guardias a socorrer a la mujer, la llevaron a la enfermería y Kristoff se dió cuenta que Hans ya no estaba cerca, eso lo puso como loco, comenzó a correr en dirección al puerto y lo único que vio fue un barco a la distancia, algo en su pecho se estrecho, no sabía si Hans iba arriba pero sentía que sí, que luego de lo sucedido había sentenciado la decisión de este.

Corrió al despacho de Elsa, encontrandola allí de pie con una carta en sus manos, estaba con un semblante extraño pero más preocupado que cualquier otra cosa.

Notó que Kristoff estaba allí, dobló la carta y sin más asintió a su mirada. — En la carta dice que volverá pronto, en cuanto acabe con todo esto... — El rostro de decepción del rubio se dejó ver, al final, Hans se había ido solo, no tenía ni siquiera la protección de Elsa y eso lo ponía de malas, pensar que estaba corriendo el riesgo por un sentimiento de culpa, no lo entendía pero quería pensar en que todo estaría bien, que Hans volvería pronto y seguirían con sus vidas.

Quería pensarlo...

A la sombra del futuro cercano - Hansoff - AU - Segunda parteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora