Avances.

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-N.O-

Tras haber ingresado al hogar y saludar a quienes estaban allí, Frank se sentó en el sofá junto a Guillermo.

"¡Oh, sí! Pero mira cuánta gente reunida, es un momento perfecto para..."
-Ni de coña, ya te lo he dicho
"No piensas dejarlos vivir en serio ¿no?"
-Dime cuándo no he hablado en serio
"¡Pero tío, dejame por lo menos acabar con Frank!"
-He dicho que no
"Tch, te odio. En serio"
-Pues tú no eres muy agradable que digamos

Willy.- ¿Y qué podemos hacer ahora?
Borja.- Pues... Hay algunas películas que podríamos ver...

Luzu no sabía qué proponer, esto era una nueva experiencia para él y para Samuel, pues hace ya muchísimo tiempo que no pasaba tiempo con amigos, el que dos personas que no fuesen Samuel estuvieran allí era extraño y sinceramente se sentía nervioso.
Aun no se acostumbraba del todo a que Guillermo estuviera con ellos y ahora también se unía Frank.

Frank.- ¿Películas...? ¡Suena bien!
Willy.- Me gusta la idea

Borja sintió un alivio al saber que lo que había propuesto había sido una buena idea.

Borja.- Vale, iré a por ellas

Luzu subió a su habitación ya que las películas estaban guardadas allí.

Mientras tanto Samuel se sintió un poco nervioso e inseguro de estar solo con ambos chicos. Sabía que no tenía de qué preocuparse ya que Luzu no tardaría demasiado, pero aún así no tenía nada de confianza en su otro "yo".
En cualquier momento podría revelarse y acabar con ambos chicos...

Por suerte no pasó mucho tiempo hasta que Luzu volvió a la sala.

El tiempo pasaba y los cuatro chicos se lo estaban pasando bien, Samuel de vez en cuando sentía un pequeño dolor de cabeza que lograba ocultar, su doble personalidad era una molestia y no soportaba tener que fingir estar bien cuando sentía que su cabeza explotaría en cualquier momento.

Tras unas horas de películas, palomitas, videojuegos y charlas random, se hizo de noche.

Frank.- Madre mía... Que tarde que se ha hecho
Willy.- Tienes razón...
Frank.- Gracias por aceptar que viniera, me lo he pasado genial
Willy.- Lo mismo digo
Frank.- Bueno. Nosotros nos vamos yendo ya, Borja, Samuel, hasta luego

Se despidieron y finalmente ambos hermanos quedaron solos en casa nuevamente.

Samuel se quejó de aquel dolor que estaba sintiendo y tan solo con una mirada le hizo entender a Luzu que tenía que salir de inmediato.

Así sin más Samuel salió de casa, no sin antes ir a su habitación para tomar un arma de el cajón del buró para asesinar con más facilidad y entretenimiento.

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Un cuerpo inmóvil y sin vida se encontraba en el suelo de aquél callejón, Samuel estaba parado frente al cuerpo de aquel hombre.

Esta vez también se había salido de control, al parecer negarse a acabar con la vida de tres personas había ocasionado que su doble personalidad se molestara de mas dándole así más necesidad de matar.

El cuerpo del hombre había sido despedazado, incluso los ojos de éste habían sido extraídos, los órganos estaban ya en la hielera especial y Samuel, guardando aquellas guantes en la misma salió del lugar después de asegurarse de no haber dejado ninguna pista que pudiera delatarlo.

Doble PersonalidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora