DÍA 20

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Mis estudios han mejorado. Tengo amigos. Vida social. Soy feliz. Por una vez en mucho tiempo me alegro de mi existencia en el mundo de la vida, y tan alegre estaba que me olvidé de escribir en ti.

Al principio tenía miedo, y tuve suerte de que los profesores no me dijeron de levantarme delante de toda la clase para decir mi nombre en alto, ni tampoco para permitir que los alumnos me hicieran un interrogatorio de tipo policial.

Y hablando de policías, mañana debo testificar. Resulta que Luke dijo que era todo mentira, que los hechos que expuso mi madre según se los expliqué no eran verdad, pero dos de mis antiguas amigas (las cuáles se apartaron de mí, pero no me acosaban) me apoyaron y dijeron lo que sucedió durante la primera, pero dolorosa, semana de clase.

Esas dos amigas están en el hospital debido a un chivatazo y me siento mal por ello.

Espero que todo se solucione y poder rehacer mi vida al completo.

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