Escapate mientras puedas... - JUSTIN BIEBER

Capitulo 8

Las apago y volvió a la cama para acostarse. El mantuvo su distancia para que no me sintiera incómoda. Los dos estábamos acostados boca arriba, Justin tenia los ojos bien abiertos y tenia las manos apoyadas sobre su panza. Yo lo miraba disimuladamente pero en un momento giro su cabeza y me vio. Me sonrió levemente y sonreí. Mierda. Parecía una idiota. Estaba observando sus rasgos detalladamente.

-Tienes frío?-me pregunto rotando su cuerpo para hacer contacto visual.

-Si, y mucho.-dije suavemente. Soltó una risita.

-Se nota, estas temblando.- Me rei tambien, es verdad, me estoy muriendo de frio. Con esto, se sentó, se sacó la campera y me la entrego.

-Toma, no creo que a Beth le agradaría si nos metemos debajo de las mantas.

-Gracias Justin. Pero no vas a tener frío? Sólo tienes una remera puesta.

-Quieres que me la saque también?-se rió y yo hice lo mismo 'ojalá' pensé

-Chiste, no en serio, no te preocupes de mi, estoy bien.-Hubo unos segundos de silencio antes de que hablara nuevamente.

-Hay una cosa que todavía no se.-me dijo con una ceja levantada.

-Que cosa?-dije apoyando la cabeza en mi mano.

-Bueno, en realidad, no se nada sobre ti; solo que tu tío es un secuestrador-dijo con una expresión rara en la cara- Mantuve silencio e hice un gesto con los ojos como para que prosiguiera con lo que iba a decir.

-No se tu nombre.-dijo mirándome con una sonrisa leve en la cara. Es verdad, no se lo había dicho.

-Me llamo _____, _____ Knightley.

- Que raro nombre...

-Ya se, es horrible.

-No, no lo dije de esa manera. Digo, es raro porque nunca lo había oído, es único y me gusta.-dijo poniéndose de espalda nuevamente para mirar fijamente al techo.

-Gracias, pero a mi no me gusta...-decidí cambiar de tema. No quería dormirme, me agradaba hablar con el y no quería que haya un silencio incómodo.

-Todavía no se que voy a hacer.

-A que te referieres?-dijo siguiendo con los ojos fijos en el techo.

-Me refiero a que mi vida es una mierda.-se quedo en silencio, creo que estaba esperando una explicación más profunda; así que seguí. Suspire fuerte y comencé.

-Cuando tenía cinco años, mis papas murieron en un accidente, mi tío se hizo responsable por mi y se quedo con toda la herencia. Así qué, me fui a vivir con el, se llama Rob. Gastó todo en drogas, alcohol y quien sabe que demonios más. Ahora estamos con las deudas hasta el cuello; lo peor es que el enfermo mental me mando a prostituir...-Justin giro mirándome serio, yo seguí mirando el techo, narrando.

- Hicimos plata con eso y logro pagar una parte mínima de la deuda.

No podía seguir con eso, así que le dije que trabajaría para pagar la deuda. El estuvo de acuerdo, pero en realidad, ese dinero lo tengo todo yo, no Rob; el no tiene ni un centavo. Sabes para que? Para escaparme. Para escaparme lo más lejos posible. Ya estaba harta. Hoy iba a ser ese gran día, pero antes de que pudiera escaparme de la casa, mi tío me mando a comprar cerveza. En ese trayecto, descubrí varias cosas sobre el, y te conocí a ti. En fin, ahora estoy acá con una persona desconocida, en la cama de una víctima de mi tío.-solté una risa irónica para disimular las ganas que tenía de llorar- Nunca pensé que tanto podía ocurrir. Ahora la verdad no se qué haré; ahora ya sabes todo. Confió en ti, aunque no sepa nada de tu vida ni nada, sólo espero que me ayudes, porque no tengo a nadie más... -y con eso Justin se levantó para abrazarme, se había quedado mudo. Me abrazo fuerte y en el oído me dijo lentamente

-Confía en mi, no dejaré que nadie te haga más daño- se me erizó la piel, a pesar de que me sentía como basura, ahora me sentía un poco mejor; no me sentía sola, ahora tenía a alguien que me apoyaba, a pesar de lo poco que nos conocíamos.

De repente se prendió la luz de la habitación y nos soltamos inmediatamente. Beth estaba parada en la puerta con las manos en las caderas. Llevaba puesto un camisón que sí se agachaba se le veía todo a la zorra, y un rodete en su cabello negro.

-Ah hola cómodos no?!-dijo sarcásticamente mirándolo a Justim como sí lo iba a matar. Mierda y yo, una pendeja de quince años metida en el medio. El se levantó de la cama y yo hice lo mismo.

-Justin, te dije que la lleves al cuarto de huéspedes cuando se despierte.-dijo medio histérica.

-Perdón amor, ahora la llevo.

-No esta bien, yo la llevo. Espérame acá. Ahora vuelvo.

- Eh vamos ...-dijo esperando a que completara la oración con mi nombre

-______

-Lindo nombre, seguime ____(tapdo) -dijo en tono dulce como sí fuéramos amigas. Que te apuesto que cuando Justin ya no nos pueda escuchar, me va a tratar mal? Falsa de mierda. Como puede andar un chico dulce como el con ella? Bueno, ni siquiera conozco a Jus, quizás es como Beth, yo que se. La seguí por un pasillo largo y amplio. Al final del pasillo, llegamos a mi supuesta habitación. Abrió la puerta y entramos. Era un cuarto grande, no tanto como el de ella pero era inmenso. Las paredes estaban pintadas de verde claro y la pared principal, en la que estaba apoyada el respaldo de la cama estaba empapelado con diseños blancos y negros. En fin, era muy lindo.

Cerro la puerta detrás nuestro y se me acerco con cara malvada.

-Mira pendeja, ya se que estas profundamente atraído por mi novio. Pero si no te alejas, ya verás lo que pasará. Es mío y de nadie más.

-A ti te parece que quiero tu novio?! Pfff si claro. -'si, quiero tu novio maldita zorra' pensé.

-Me tienes envidia por Justin, ya se, no importa, todos se sienten igual-dijo haciéndose la superior.

-No me interesa ese chico y no le tengo envidia a una zorra malcriada.

- Que me dijiste?!-pregunto entre dientes acercándose cada vez más.

-Si, me oíste bien, ZORRA MALCRIADA. -me dio un cachetazo y yo le empece a tirar del pelo. Logre tirarla al piso pero ella me agarro de la pierna y me hizo tropezar. Le iba a pegar, pero antes de que hiciera eso empezó a gritar

-JUSTINNN!!!!!!!

Al cabo de unos segundos apareció Justjn, y quede para la mierda. Genial. Estaba tirada sobre ella tirándole de los mechones y la muy puta ahí haciéndose la pobrecita. El me miro con el ceño fruncido y corrió hacia ella. Me pare rápidamente.

-Que paso?!?!-pregunto preocupadísimo mientras ayudaba a Beth a levantarse del piso. Lo abrazo dramáticamente y Jus le empezó a acariciar la espalda.

-No se no hice nada, sólo la acompañe hasta acá y me empezó a decir zorra y me tacleo y no sabía defenderme-empezó a lloriquear. Tenía unas ganas de encajarle una piña.

-Pero no te das cuenta que te esta mintiendo?! A mi me empezó a decir cosas y ella me pego una cachetada! -grite con los brazos levantados defendiéndome. Pero ni ahí me creyó. Lo único que hizo Justin fue fulminarme con la mirada;me saque la campera y se la revolee por la cabeza. Se dio media vuelta y se fue con Beth.

Me tire en la cama boca abajo y empecé a llorar. No, no voy a llorar, me voy a mantener fuerte. De qué me sirve lamentarme de mi vida? De nada; de nada en absoluto. Me limpie las lágrimas, me saque las botas y las deje al lado de la cama, luego me desarme la trenza, y al final, vacíe mis bolsillos cargados de objetos y los deje sobre la mesa de luz. Apague la luz, abrí la cama y me metí. Estaba cansadísima. La cama era muy cómoda así que en cuestión de segundos, me dormí profundamente.