Básicamente antes me dedicaba todo el tiempo a pelearme con la realidad.
El hecho de no aceptar ciertas situaciones me disgustaba, quería eliminarlo, moverlo, erradicarlo de mí y de mi vida.
Me di cuenta que estaba equivocado.
Si deseo realmente eliminar, mover, cambiar algo de mi vida, debo, sin duda alguna, aceptarlo.De la mano de la aceptación viene el cambio.
Fue difícil, para qué decir que no.
Pero pronto las cosas estuvieron bien, cambiaron, se hicieron amenas y placenteras para mí. Pero no fue exactamente por aceptarlas y no actuar, sino todo lo contrario, el hecho de aceptar permitió que afrontara ciertas cuestiones que me planteaba.
Hoy soy libre.
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Lo leí por ahí
Short StoryEsta historia no es una historia sino una recopilación de varios textos y fragmentos que he leído, escuchado o escrito yo misma, por lo tanto no tiene un hilo como tal, sin embargo es hermosa y merece una oportunidad y si tu se la das me harás muy f...