Historia sin título.

¿Será la hora?

Parecían las 6 de la madrugada, me atormentó la idea de que todo iba a cambiar. Pero ya no había vuelta atrás, sentí la sensación de que todo permanecía en el pasado, mi antiguo yo, las escasas experiencias que viví por las oportunidades de la época,los escasos recursos de entonces, y mi yo de ahora que en poco tiempo pasaría a la historia. 

Aunque en realidad... a la historia de nadie. Pensándolo cada minuto cada vez mas asustada y exhausta por la situación, decidí levantarme y dejar de lloriquear. Me llamo Marie, y a mis 73 años de edad, sola y sin familia, hace tan solo 2 días me acababan de dar la peor noticia de mi vida, pero ¿debería mantener la esperanza? ¿O tirar todo por la borda? No me sentía realizada, no había hecho nada que valiese la pena, no he reído tanto como hubiese querido, no he ayudado a los demás como me propuse, ni he apreciado el tiempo de mi vida como tal merecía.

Ahora tan solo soy una vieja gruñona y amargada, que espanta hasta a el cartero, eso sí, siempre he intentado conservarme, ¿para qué? Pues no lo sé, oscilo entre el 1'64, pelo rubio, bueno, no nos engañaremos, las canas ya hicieron su fruto, pelo plata y laceo, arrugas ya bastante marcadas. Ojos azules, y peso estable, siempre he llevado una vida sana ciertamente.

Vida no envidiada. Me jubilé hace ya 8 años de el único y duradero empleo que me ha gustado, trabajaba en mi propia tienda de ropa 'Marie's', creo que es por la única cosa que soy conocida aquí, por mi extienda de ropa, lo único que me llenaba, aunque no tenía una vida envidiada como ya he comentado, era una mujer feliz, ahora...desde entonces... los niños me consideran una decoración de Halloween, una cascarrabias por decirlo así.

Pero, ¿será hora de cambiar todo?

Tras la noticia recibida hace tan solo dos días, un 7 de mayo de 2007, ha cambiado mi mentalidad, y mi mente todavía intenta asentar la noticia, esperando otra llamada que indique que nada era verdad, tan solo era una broma de mal gusto. Yo lo perdonaría y seguiría tal cual, pero no, esto ha cambiado, todo pasa, todo llega, todo cambia.

Será verdad, tan solo una mala noticia puede cambiar tu semana, tu día, tu momento, tu manera de ver las cosas.... ¿Será esto realmente un sueño?